La Chica de los elementos

19.Sueños

—¡Corre !.- gritaba la voz de una mujer, pero no se veia nada.

— ¡juliett corree!.-¿por qué tengo que correr?, ¿de dónde viene esa voz? .De pronto una niña salio de entre los arboles, venia corriendo , tenia el rostro asustado y temeroso, es una niña de cinco años, no se porque  tengo la necesidad de ayudarla pero ella no me ve, solo corre sin ningún destino en particular, decido seguirla. Me echo a correr detras de la niña, se me hace dificil seguirla, es muy rápida; se detiene frente a una roca inmenza con hojas a su alrededor, mira hacia atrás para verificar que nadie la a seguido. La niña pone su mano en la roca, una luz se forma entre los dos, y la traspasa. ¿Cómo puede ser eso posible?, me acerco a la roca y hago lo mismo que la niña, la traspaso sin dificultad. ¿Es una casa? si, todo esta oscuro, con lo poco que se ve puedo apreciar que estoy dentro de una casa y tal parece que es de la niña. Las luces se prende, iluminando todo el lugar, todo está bien ordenado, siento que estoy en casa, el calor que emana me hace sentir protegida; empiezo a buscar por tadas partes a la niña, siembargo no la encuentro, se debio esconder, pero ¿dónde?.Un fuerte ruido me hace detener mi búsqueda, dos mujeres de negro aparecen, no puedo ver sus rostros, la gran capucha que tienen no me lo permite. Caminan hacia la pared del fondo, la traspasan, salen con la niña en sus manos, esta forcejea con todas sus fuerzas, pero no logra liberarze.

—¡suéltenme!, ¡suéltenme!. -gritaba a toda voz, no sabia que hacer, también empece a gritar.

—¡sueltenla!. -no me escuchaban, me acerque y con todas mus fuerzas empuje a una, sin más nada paso. Empece a llorar por no poder ayudarla; su dolor, su tristeze, y el miedo que reflejaba su rostro, me hacia sentir impotente. Se la llevaron, esas mujeres se llevaron a la niña.

—¡no se la lleven!. - grite con la esperanza que me escuchen, la casa quedo en un sepulcral silencio.

—¡no!, ¡no se la lleven!. - seguía gritando.

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—¡No!. -grite, era un sueño, pero se sintio tan real, miro a todos lados y me doy cuenta que estoy en los dormitorios, ¿quién era esa niña?, ¿por qué se llama igual que yo?, ¿esa casa existirá?,¿qué paso con la niña?, necesito saber las respuestas, esto no fue solo un sueño, era real lo se, voy a descubrir la verdad.

—bruno, te necesito. - susurre, lo necesito para que me sienta protegida a su lado y me diga que todo va estar bien, lo amo tanto que seria capaz de matar a cualquiera que le haga daño. Después de ese sueño no puede pegar un ojo en toda la noche,mi cabeza daba vueltas y vueltas; me levante y me fui a bañar, me cambie y sali hacia los dormitorios todos seguian durmiendo, antes de que despierten me subi a mi cama.

Dentro de dos horas los trens ya empezaban a gritar, para que nos levantemos.Me doy la vuelta hacia la cama de Carolina, no está, solo hay una almohada en su lugar, ¿dónde se fue?, qué hago, que no se den cuenta que no está, no quiero que le hagan daño, y ¿si le pasó algo? no, ella estaba aqui cuando me dormi, entonces ¿en qué momento se fue?. En mi desesperación un trens se acerca a mi, me mira luego mira la cama de mi amiga, siento que mi corazón se va a salir, ¿qué voy a hacer?. Mueve su cabeza para ver que no hay nadie cerca, se pone enfrente, mira y sonríe.

—tranquila, Carolina está en otro lado. - dijo en voz baja, con eso mi corazón vuelve a latir normal, pero de vuelta se para ¿se la llevaron? no puede ser.

—¿dónde esta mi amiga?. - pregunta también en voz baja, me vuelve a sonreír, no se porque me da confianza.

—estaba conmigo, pero se quedo a dormir, es muy floja. -dijo, solto una leve risa y nego con la cabeza.

—tú eres su novio. -

—si, por favor te pido que no digas nada. - yo asentí con la cabeza.

—soy Matt, y tú juliett ¿verdad?.- volvi a asentir con la cabeza.

—bueno, me voy solo tenia que avisarte para que no te preocupes, Carolina me obligo a hacerlo, nos vemos luego y hablamos mejor, tú, carolina, bruno y yo.

—¿bruno? .

—si,  carolina me cuenta todo, pero no te preocupes su secreto esta bien guardado conmigo.- dicho eso se fue. Me pare y sali de los dormitorios, voy a la cafeteria; acabo mi desayuno lo mas rapido posible. De lejos puedo ver a bruno, hablando con otro entrenador, me ve y deja de hablar, se despide y comienza a caminar hacia el bosque, lo sigo y me adentro al bosque pero lo pierdo.

—bruno, ¿dónde estas?. - grite, siento unas manos en mi cintura y me levanta por los aires, comienza a girar, suelto una carcajada, me encanta estar haci con él. Me baja, me da vuelta para que lo mire, e imediatamne me besa, mis brazos rodean su cuello profundizando el beso, siento que vuelo cuando estoy con él. Se separa despacito, me mira con una sonrisa de esas que me encantan.

—te amo. - dice, mi corazón salta de alegría.

—te amo. - respondo, me toma de la mano y caminamos hacia nuestro lugar de entrenamiento.

—tuve un sueño. -dije

—¿lo mismo de siempre ?.-preguntó, sin detenerse, todavía tomados de la mano.

—no, soñé con una niña.

—¿una niña?.- nos detenemos en nuestro lugar de entrenamiento. Se para enfrente de mi, y comienzo a contarle todo lo de mi sueño, su cara tiene varias expresiones conforme le voy contado.

—hay algo más.-

—¿qué?.-preguntó.

—esa niña, se llama juliett. - dije, su cara cambio rápidamente de sorpresa a una de asustado.

—esa niña, eres tu.- sentenció.

—no lo se, pero necesito saber que le pasó, cuando esas dos mujeres se la llavaron.

— Te acuerdas cuando te hable, de una historia que nos contaron y necesitabamos saber, para enteder por qué los entrenamos.-

—si, pero que tiene que ver eso, con mi sueño.

—si esa historia es real, y tu eres ese element que buscan, te van a matar, para ellos tú eres peligrosa.- dijo, se notaba preocupado y yo también lo estaba.

—¿que voy a hacer?. - pregunte, con la cabeza mirando el suelo, agarró mi barbilla y me hizo mirarlo.

—no voy a permitir que te hagan daño, nunca, me escuchas, nunca.

Lo abraze lo más fuerte que pude.

—ahora tenemos que averiguar más de esa historia, también ¿qué paso con la niña? y si esa niña eres tú, ¿cómo escapaste de esas mujeres? y sobre todo saber por qué no recuerdas nada de eso.- dijo

—si, gracias por ayudarme tanto.

—siempre lo voy a hacer, dejemos eso por un rato vamos a entrenar, ahora más que nunca tienes que aprender a dominar más tus poderes. - asentí y comenzamos a entrenar, juntos somos imparables, me sorprende lo mucho que mejore en todo este tiempo y se lo debo a bruno, sin su ayuda seguiria pérdida.