Capítulo 18°

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Skyler se vio atrapada en un día más de compras, solo que en esta ocasión no la acompaño Dominic, si no su futura madre y abuela. Estaban en busca de un vestido de gala para esta noche, ya que después de tanto tiempo, según Rouse, era la gran noche del anuncio del compromiso entre Skyler y su nieto.

Al igual que Dominic no estaba para nada entusiasmada pero trato de tener una sonrisa todo el tiempo, ya que Rouse estaba notaba tan contenta que no quería arruinar su felicidad. Por lo que había escuchado, ella no sabía nada sobre su embarazo y mucho menos el que Skyler y Dominic no se conocían casi de nada. Los únicos que estaban al tanto de la historia eran sus padres. Al parecer a su mamá no le importaba mucho, ya que estaba bastante alegre con la idea de que ellos contrajeran matrimonio, además Shannon le había dicho que estaba aliviada de que fuera Skyler quien se casara con su hijo que Karin, ya que no le gustaba para nada esa mujer.

Skyler se preguntaba qué clase de persona era Karin como para que los padres de Dominic no la quisieran, ella no la conocía mucho pero lo que había aprendido en sus pocos encuentros es que no se le debía de acercar a más de tres metros, ya que cada que la veía terminaba muy mal parada. Ella no sabía cómo reaccionaría si le pasara lo mismo que a Karin, pero de alguna manera pensaba que no sería tan violenta como ella lo demostraba, si para Skyler todavía era difícil aceptar que ya no tendría todo por lo cual había trabajado tanto y todo lo que había planeado, no se imaginaba para nada el dolor que debía de tener Karin al enterarse de que lo que tanto soñó no se haría realidad.

— ¡Skyler! —Shannon la sacudió por el hombro —. ¿A dónde te vas hermosa?

—Lo siento, yo solo me puse a pensar en...

—Mi nieto, por supuesto —afirmo la abuela —, pero este es un especial momento de chicas, así que por al menos un tiempo trata de no pensar mucho en él, solo concéntrate en el vestido que usaras esta noche.

Skyler se mordió el labio. No le gustaba la idea de gastar tanto dinero por un vestido que estaba segura, no se pondría otra vez. Pero les dio el gusto, por lo que asintió y siguió caminando para llegar a una tienda donde al parecer, solo había ropa de un diseñador del que nunca había escuchado.

Skyler jamás en su vida había entrado a una tienda como esta, era tan grande, tenía una recepción y más atrás se veía la zona de espera, con hermosos sillones que parecían muy cómodos; los colores que utilizaba la tienda eran diferentes tonalidades de blanco, haciendo resaltar los exquisitos vestidos de colores. Llegaron a recepción y la señorita que se encontraba ahí de inmediato se puso de pie para salir, acercando a ellas.

—Señora Amiel —saludo de beso a Shannon, quien le respondió el saludo —, un gusto volver a verla —Rouse se aclaró la garganta, quería hacerse notar —. ¡Señora Amiel! Dios, perdone pero hace mucho que no la veía, no la pude reconocer —se agacho para poder saludarla —, déjeme decirle que los años no pasan por usted, se ve tan hermosa como siempre.

—Por supuesto —contesto.

La sonrisa que Rouse le dio era bastante falsa, pero no por ello la chica dejo de sonreír también. Skyler se movió un poco incomoda al ver como la recepcionista la miraba de pies a cabeza, alzando una ceja en cuanto llego a sus ojos.

—Veo que hoy trae a su damisela con usted.

—Ella no es mi damisela —el tono de su futura abuela era un poco grosero, siendo sinceros era de enojo. Rouse casi quiso bajarse de la silla para zarandear a tan estúpida empleada de Marc —, ella es mi nieta, la prometida de Dominic.

—Cuanto lo siento —le tomo la mano a Skyler —, perdóneme señorita, es solo que... soy una tonta, de verdad le pido mil disculpas.

Skyler se sintió tan incómoda con la situación, volteo a ver a la abuela suplicándole con la mirada el irse de ahí.

Virgen EmbarazadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora