Ella Me Salvo

Capítulo 39

NARRA KILIAN

Abro la puerta de mi casa sin ánimos de avisar a mi madre que llegue. Pero como siempre, ella y su sensor descubren mi llegada. Sale corriendo de la cocina y va a mi encuentro.

—Hola hijo ¿como te fue?— me pregunta con una gran sonrisa.

La miro forzando una sonrisa.

—Me fue...bien— subo las escaleras sin dejar que pregunte algo mas.

No me tomaré ni el tiempo de decirle a mi madre que recuerdo todo.

Llego a mi habitación y me tiro sobre la cama tomando una almohada y poniéndola en mi rostro para gritar sin ser oído.

Dios, ¿porque habré hecho eso? Soy un completo idiota.

Flashback.

—Te amo Briana— le muestro una sonrisa.

Ella se mantiene con sus ojos abiertos como platos. Habré la boca para hablar pero se le dificulta.

Al ver su reacción, me doy cuanta de las palabras que dije sin pensar.

—A-Ah...— siento como mis orejas, mejillas y cuello se calientan. Debo estar sonrojandome al 100% de mi capacidad. La suelto de los hombros con mis manos temblando como gelatinas. Comienzo a sentirme nervioso, mis corazón comienza a latir como si en algún momento se fuera a salir— ¡Dios!— me arrodillo mientras tomo entre mis manos mis mejillas sonrojadas. Trato de ocultar mi rostro de Briana— L-Lo que qu-quise decir...mm...y-yo...— tartamudeo.

Ella parece al fin reaccionar y me comienza a mirar.

—N-No me mires— oculto mis cara entre mis piernas sintiendo como me pongo cada vez mas rojo.

Que vergüenza.

—Kilian, yo...— se arrodilla frente a mi obligándome a mirarla. Al verme se le escapa un sonrisa— Estas tan rojo como un tomate.

Miro a otra dirección.

—N-No lo digas— mi voz es apenas audible.

—Lo siento...— su tono fue tan arrepentido que supuse que ya no habla sobre mi sonrojo. La volteo a ver y esta me imita— No puedo corresponder a tus sentimientos.

Ahí, mi corazón se rompió.

—L-Lo supuse— hago una sonrisa de boca cerrada.

—De verdad lo siento— baja la mirada, se levanta y se dispone a irse.

Tengo que detenerla. No quiero que esto quede así. Aunque ya me rechazó.

—Es-Espera— tomo su brazo y la detengo. Se gira y me mira confundida.

Me vuelvo a sonrojar bajando la mirada.

—S-Se que no puedo obligarte a e-estar conmigo— la suelto y aprieto mis puños cerrando los ojos— Pero solo necesitó tiempo para demostrarte las razones por las que quiero estar siempre contigo.

Se crea un enorme silencio. Por cada segundo que pasa me pongo mas nervioso y siento como mis manos comienzan a sudar, esperando su respuesta.

—Lo siento Kilian, pero no creo que funcione— se vuelve a girar retomando el camino a la que le había interrumpido, dejándome pasmado.

¿Que es lo que acabo de decir?

Fin del flashback.

Fui rechazado.

Así que así se siente. Como una puñalada en tu corazón. Aunque debe sentirse peor la Friendzone. Como sea, ser rechazado realmente duele. Jamás creí poder decirle mis sentimientos a Briana, tampoco fue buena idea decírselo apenas recorde todo.