El mismo lugar, la misma hora, el mismo café, el mismo hombre, pero un sentimiento que se volvía cada vez más y más grande, en su interior, esa pequeña chispa que sintió al segundo día de conocerlo, se estaba volviendo un incendio, haciendo que cada vez que al mínimo roce de sus cuerpos ella se volviera en una chica en llamas.
El la hacía vibrar como nadie lo había hecho jamás, ella estaba volviéndose loca por él y su misterio, ella quería descubrir lo que él ocultaba a cuesta de todo.
-¿Sabes?-Ella lo miró a los ojos, decidida a decirle a él todo lo que sentía en aquel preciso instante-Me estoy volviendo loca
-¿A qué se debe eso?-Respondió él con el mismo tono serio pero encantador
-A ti, tú me estas volviendo loca, no sabes cuánto, estoy perdida en mis propios pensamientos, me has hecho perder la cabeza, no te pareces a nadie que pude haber conocido antes.
-No tienes porque perderla, Solo no pienses en mis cosas, porque son mis cosas -Dijo haciendo énfasis.
-¿Como dices eso? -Dijo ella indignada.
Ella noto como el se ponía tenso. luego de una discusión, unas cuantas lagrimas y un corazón roto, el se marcho, se esfumo luego de decirle "esto... se acabo" Sin dar mas explicaciones.
Alison suspiro sentada en su sofá, en pocas horas la iría a buscar su novio, no es que era realmente feliz, pero la hacia sentir bien, Luego de que Dylan había aparecido de sorpresa en su casa, los ánimos de ella se habían esfumado.
Se quedo mirando el hermoso crepúsculo que pintaba el cielo de aquella tarde, Y se sumergió en sus propios pensamientos.
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Vengo del aire
Teen FictionA veces el misterio puede ser atractivo, pero cuando no tienes las respuestas a las preguntas que puedan surgir, el desespero actúa y el amor se acaba.
