-...Te dije que no conectes eso ahí -le advertí a Connor.
Él tenía un cable rojo en sus manos y trataba de colocarlo en un lugar que no iba, él muy estúpido no se llevó de mí y se electrocutó al primer intento.
Muchos dirían, ¿Y para qué carajos lo está volviendo a intentar? Pues, lo mismo me pregunto yo, creo que su estupidez llega a niveles extremos.
¿Recuerdan el castigo que el director nos iba a poner? Bien, sólo fue arreglar su ordenador, cosa que se me haría mil veces más fácil si no fuese por el cerebro de maní de Connor.
-Y yo digo que sí va ahí, sólo que no quiere entrar-dice acercando el cable al ordenador.
"Grave error."
Su estupidez acaba de darle otra descarga eléctrica, esta vez no aguanté a risa y me acaí en el piso junto a él. Él muy idiota descerebrado agarró mis manos y yo también me electrocute.
Mi cabello se encrespó y juro por Dios que lo mato.
-Te... Voy-y... A... Mat-ar-le aseguré a Connor.
Y es verdad, si esto no nos mata a los dos, yo personalmente me encargaré de mandar a este descerebrado al cielo, o al infierno, nunca se sabe.
Escuché el sonido de la puerta abrirse, al parecer alguien había entrado o algún ente maligno nos había venido a buscar para llevarnos al infierno.
"Cualquiera de las dos era racional."
-¡Oh Santo Cielo!-exclamó él director, al entrar a la oficina-¿¡Qué pasó!? ¡Los dejo una hora solos y casi se matán!-dijo desconectando el ordenador.
Inmediatamente Connor soltó mís manos y la descarga eléctrica terminó. Lo primero que hice fue tirarme sobre él, pero las manos del director me detuvieron.
-¡Suelteme! ¡Lo voy a matar!-dije forcejeando.
El director Frank me arrastró con el fuera del alcance Connor.
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La Hacker
Teen FictionTodos en el instituto Afton le tienen miedo a Keitlen. ¿La razón? La chica es la ama en la tecnología, lo sabe todo, la última vez que alguien la desafió, el pobre chico tuvo que cambiarse de instituto. Pero alguien está empeñado en conseguir toda...