-Hola...-traté de sonar poco despreocupado y no un loco desesperado.
Ella me ignoró y siguió buscando algo que comer.
«Genial. Trato de ser sociable y me ignoran.»
Pues al diablo con la sociabilidad y la calma que dijo Alex. Vamos al punto.
-Oye, se que eres amiga de Keitlen y quiero saber porque no ha venido a clases hoy, ¿Me puedes decir?-pregunté de una.
Si esto no funciona mandaré a Derek y sus encantos.
Y si eso tampoco funciona, pues Alex, sus libros y encantos de cerebrito tendrán que ayudarme.
«Y si nada de eso funciona, pues a matar mí curiosidad directamente. »
-No, no puedes saber-respondió dándome una sonrisa fingida y me esquivó.
Resoplé, «no me rendiré.»
Caminé detrás de ella como un acosador.
-¿Por qué no?-cuestioné un poco desconcertado.
La escuché gruñir.
-Porque ni yo lo sé -respondió cuando llegó a una mesa completamente vacía.
Junté mis cejas confundido.
«Genial.»
-Bueno...-dije no muy convencido.
Di la vuelta para irme pero quise que me tragase la tierra al ver a Derek y Alex salir de la fila de la cafetería, con tres hamburguesas en su bandeja de comida.
«Ok, acepto la comida, a ellos no.»
Miraron en todas las direcciones buscando algo, o a alguien mejor dicho. Cuando me ubicaron casi corrieron hasta donde me encontraba.
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La Hacker
Teen FictionTodos en el instituto Afton le tienen miedo a Keitlen. ¿La razón? La chica es la ama en la tecnología, lo sabe todo, la última vez que alguien la desafió, el pobre chico tuvo que cambiarse de instituto. Pero alguien está empeñado en conseguir toda...