Todos en el instituto Afton le tienen miedo a Keitlen.
¿La razón?
La chica es la ama en la tecnología, lo sabe todo, la última vez que alguien la desafió, el pobre chico tuvo que cambiarse de instituto.
Pero alguien está empeñado en conseguir toda...
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-¿QUÉ?-cuestionó Yannet asombrada y a la vez asustada.
Le di un sorbo a mi chocolate caliente y le miré.
-Lo mismo que escuchaste, es todo bastante extraño, nunca lo había visto en el edificio -le expliqué.
Básicamente en cuanto llegué al instituto, le había contado a mi amiga lo que me había pasado ayer, lo cuál al parecer le ha sorprendido bastante.
-Alejate de ese chico, no parece ser casualidad lo que esta pasando -dijo bajando el tono de voz.
Y eso pensaba hacer, no quería liar más cosas en mí vida, ya tengo bastantes complicaciones como para querer más.
-Oye Keitlen-llamó mi atención, le volteé a mirar-. ¿Qué ha pasado con Connor? Ya sabes...-jugó con sus cejas.
Me encogí en mi asiento queriendo desaparecer.
-Pues, no ha pasado nada-dije tratando de no darle importancia.
Al escuchar mí respuesta se echó a reir.
-Va, no hay nada que no sepa, recuerda que uno de sus mejores amigos es mí novio-me recordó obvia.
Gruñí frustrada, novio palabra que sólo estuvo en mi vocabulario tres veces en toda mi vida.
-El es raro, no me gusta, aunque yo si a él, que es lo más extraño de la historia-dije enfocando mi mirada en el lápiz, evitando cualquier contacto visual con ella.
-Claro...
Antes de que pudiese decir algo más la campana sonó interrumpiéndola y cortando nuestra extraña conversación.
(...)
-Hoy, como ya les he avisado la semana pasada tenéis exámen...-nos recordó la profesora de inglés y todos comenzaron a quejarse-. Tienen diez minutos para repasar antes de que de el examen.
Y esa fue la señal para que todos se juntaran en grupos alrededor de los más inteligentes del salón. Yo en cambio me dispuse a repasar sola.
