Capítulo 21 | Lejos. Tú y yo.

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No le importaba qué vendría después, sólo sabía que tenía que llegar hasta ella y arreglar las cosas.

Quería comprobar que lo que ella le había dicho era real o sólo era otra de sus excusas para alejarse de él.

Justin abrió la ventana de su habitación y salió de ésta con sumo cuidado. Estaba a punto de oscurecer. Sabía el camino a casa de Jules, no estaba tan lejos, después de todo.
Justin cayó al pasto y se sacudió mientras dejaba su casa atrás y se adentraba a la tranquila calle de la avenida.

Justin jamás entendería porqué su mamá se volvió tan sobre-protectora con él. Sí, un gran punto era por su condición, pero ¿por qué mantenerlo encerrado del resto del mundo?.

A Justin ya no le gustaba tanto que usaran con él la palabra "Bebé".
A excepción de Jules, él era feliz con ella en todos los sentidos posibles de una forma inexplicable.

El cielo se tornó gris y en tan sólo segundos, una lluvia apareció.
Justin se asustó un poco al oír los relámpagos.

Recorrió dieciséis cuadras sin detenerse, luego dobló a la izquierda y recorrió siete más, finalmente dos a la derecha hasta encontrarse en una calle en donde la última casa era la de ella.

El chico observó la ventana de la habitación de Jules y se podía notar una pequeña luz encendida.
Sin perder más tiempo, trepó unas rejillas que daban directamente hacia el cuarto de ella.

Por otra parte, Jules tarareaba una canción lenta mientras tomaba un baño caliente en el baño de su habitación.

Justin agradeció con una pequeña sonrisa en sus labios ya que la ventana no tenía seguro. Se adentró a la habitación con sumo cuidado sin hacer el ruido mínimo. Escuchó ruidos en el baño de la habitación, la puerta estaba semi-abierta y observó a Jules detrás de la cortina.

Justin se despojó de sus prendas mojadas y decidido, se adentró al baño, una vez dentro, abrazó a Jules por detrás haciéndola jadear del susto.

-¡Justin! ¿Qué estas haciendo aquí?! -Jules se voltea a ver al chico-. ¿Por qué estás tan frío? -Cuestiona.

-Vine p-por ti. Está lloviendo. -Es lo único que pudo decir.

-Dios, te puedes resfriar, vamos, necesitas un baño. Hablaremos si es lo que quieres, pero tienes que darte un baño caliente o vas a enfermar. -Dice ella tratando de conservar la calma-. Agradece que mi madre no está en casa.

Jules tomó lo necesario y empezó a bañar a Justin bajo la atenta mirada del chico.

-Eres muy bo-nita. -Soltó Justin.

-Gracias. -Las mejillas de Jules se enrojecieron.

Luego de unos minutos, Jules cerró la llave de la regadera y se envolvió con una toalla al igual que una para Justin.

-¿P-Por qué no con-testas mis llamadas o mensa-jes? -Pregunta de repente el ojimiel.

-Créeme que es lo mejor para los dos. -Responde fría.

La castaña camina por su habitación y se coloca un pijama rápido. Busca un gran suéter suyo y sé lo entrega a Justin para cambiarse.

-Jules...

Jules suspira mientras se mira por el espejo de su tocador-. Justin, lo que te dije, yo...

-Es mentira. Lo sé. -Dice él sin tartamudear sus palabras.

Jules se encara con él-. ¿Por qué haces esto más difícil de lo que ya es?.

-¿Qué? -Justin junta sus cejas sin entender.

Inocencia Perdida © | TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora