El precio del negocio - gay

Sorpresas.

Abro mis ojos antes de bostezar y estirarme, para mi sorpresa, mis compañeras de cuarto están aún dormidas. Ayer nos acostamos tarde contándonos las historias de la vez que llegó la carta a nosotros, ahí les confesé de mi homosexualidad y sobre mi novio que vendría a estudiar también aquí, no sé que tienen todas las chicas por tener un amigo gay, pero se emocionaron mucho y me pidieron que le tenía que presentar a mi novio, se salvan de que Emanuel es homosexual pero si no en la vida se lo presento.

Ahora que ya acomodé mi cama, decidí hacerles desayuno como acto de amistad.
Yo estaba tranquilamente buscando un sartén hasta que doy vuelta y casi caigo del susto, en el marco de la puerta estaba Fiorella, una de mis nuevas amigas, con todo su pelo desordenado y por haber llegado sin decir nada le dije -Ey! Para la próxima avisa! Casi se quedan sin desayuno cuando veo esa criatura toda desgreñada- me hizo cara de una risa falsa y me dijo - agradece que estas haciendo desayuno para los 3 sino no sólo te mataría del susto - ahí estuvimos riendo y vacilando un poco hasta que vimos como se acercaba Laura, la otra integrante del apartamento, esta si por lo menos se había peinado, cuando llegó la vacilamos con que ya sabíamos quien era la más dormilona y sólo decía que era cansancio pero no era dormilona.

Los nuevos entrarían a la 1, así que a esa hora todos deberíamos entrar a las habitaciones o como máximo estar en los pasillos de cada uno y en la zona de descanso, que era algo muy lindo, parecía un parque para niños, con amacas, árboles que tapaban todo, mesas y bancas de madera, era un lugar realmente fresco.

Hoy en la mañana recibí un mensaje de Emanuel que decía que se moría por verme y compartir toda está vida universitaria juntos, ya definitivamente estoy enamorado de él, amo como es conmigo, cada palabra, cada momento.

Ya son la 1 y estoy sentado junto a mis nuevas amigas en una de las mesas y desde donde estamos es posible oír como daba inicio a la actividad protocolaria con un pequeño video de la trayectoria de la Universidad.
Cuando escuché las palabras de la rectora, y luego los aplausos, se nos permitía ser libres por toda la Universidad, ya que hasta mañana se iniciarán clases completamente regulares, además hoy teníamos el día para plantear nuestro horario y llevarlo a la dirección de cada facultad, para ver si sería aprobado.
Tomé a mis amigas de la mano y les dije que iríamos a que vieran a mi novio y ella sonrieron emocionadas.

Emanuel estaba en una de las bancas cerca de la Facultad de ingeniería, estaba de espalda pero jamás lo confundiría. Lo abracé por la espalda y le di un beso en su cuello a la vez que le dije - Hola mi vida- él me tomó y me dio la vuelta para luego darme un intenso beso y tomándome por la cintura.
Cuando acabó el beso, le dije - mira, ellas son mis compañeras de habitación, ella es Laura y ella es Fiorella, chicas él es mi Emanuel - mientras las señalaba respectivamente, el tendió su mano.

Pasamos toda la tarde con lo de los horarios, en el caso de Laura tuvo que hacer ajustes por que se lo negaron, en nuestro caso fue una suerte que no nos lo negaron, aún más que las filas eran enormes.

He visto que muchos chicos, y chicas también, se le quedaban viendo a Emanuel, aún así estando tomados de las manos, me daba mucho enfado, pero lo bueno es que si notaba que no les prestaba atención, me imagino que alguien tan guapo como él, estaba acostumbrado a que mucha gente lo viera, no por mi parte, que si noté alguno que otro que me miraba pero, como era de esperar, no me llamaban la atención, y Emanuel terminaba por fulminarlos con la mirada.

Lo admito, solo miré a uno un poco guapo, pero no sentí nada más un "que joven tan guapo" por mi mente.
Amo muchísimo a mi novio y por mi parte no soy capas de serle infiel.

Así pasó el día, me invitó a cenar en un gran restaurante, aún no tenían de sus restaurantes acá, pero si era de uno de los amigos de su familia.
Durante la cena si recibió una llamada, al parecer era su padre pero si le dijo que estaba conmigo y además que ya mañana iniciaban las clases, discutió un poco, al parecer su padre no estaba muy preparado para trabajar sin su hijo, pero no tenía mucho qué hacer.