Capitulo 18

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Después de ver cómo la cola de al lado avanzaba un poco más que la mía, pero de nuevó se quedo parada... y cuál fué mi sorpresa que Eric se encontraba justo al lado de mi coche, pero no iba solo, motivo por el cual le hubiese saludado, sino iba con una mujer pelirroja, con el pelo rizado y largo... andaban besuqueandose, muy exageradamente diría yo, y justo para que no me viese comenzé a deslizarme un poco por el asiento asta abajo, pero mi niña, mi querida hija que era muy audaz si que lo vio... y cómo hacer comprender a una niña de 3 años que no devería de hablar en esas situaciones...

- Mira mami!! es el tito Eric...- comenzó a agitar la mano.

- Cariño que váa!!! ese no és! te estás equivocando, sólo se le parece.. no es ni su coche..

- Si mami, si que lo es, mira lleva mi poni rosa en el asiento trasero... es el es él!!- comenzó a pegar botes en su sillita y a pegar pequeños grititos, yo como quería evitar esto ya que Eric estaba demasiado concentrado en comerle la boca a la pelirroja, cosa que me molestaba como la mierda (aunque evidentemente no tendría porqué molestarme), en todo este tiempo se a portad como un amigo, de vez en cuando me daba abrazos o besos cariños en la cara evidentemente, que me hacían tener mariposas en el estómago, pero él no sentía nada asi que... además a la vista estaba que se estaba morreando con otra y... buah.. no devería pensar en eso.. recuerdo aún esas palabras que me dijo hace meses de que éramos hermanos..

Cuando me dí cuenta mi pequeña pegaba con sus pequeñas manitas en el cristal para que su "tito" le hechase cuenta, cosa que desde luego no hacía, teniendo tremenda mujer entre sus brazos no iba a dejarla para ver a mi pequeña.. por lo tanto para que no se diese cuenta comenze a subir el volumen del radio...

Y lo subía y mientras más subía el volumen con los cantajuegos más gritaba mi enana, y asi.. hasta que me dí cuenta que mientras yo hablaba con mi niña para que se callase, ésta miraba hacia la ventana con una sonrisa boba y su pequeña manita saludando, entonces me di cuenta que no sólo Eric y su pelirroja estaban pendiente de mi, sino que todos, absolutamente todos los ocupantes de los coches se fijaban en esas ridiculas pero pegadizas canciones de niños que tenía a todo volumen y a mi pequeña le encantaba y bailaba con su sonrisa melleta.

Me quise morir, en serio, no sólo le había cortado el rollo a Eric, a quien me negaba mirar, sino a todos los conductores de mi alrededor, bajé el volumen y me dispuse a andar un poquitin para delante, ya que mi fila había avanzado, solo unos metros.

De nuevo la fila de Eric a mi derecha comenzaba a avanzar y me obligué a mirar hacia mi izquierda aunque unas pitadas a mi derecha hizieron que mirase, y ahí estaba Eric, pidiendome con una señal de la mano que bajase mi ventanilla, ¿ qué iba ha hacer? ya me había visto, no había marcha atras, así que abrí mi ventanilla y con lo sonreí tímidamente.

- Hey ¿que tal? atrapadas en el trafico como yo me imagino no? jaja

- titoooooo!!!! titooooo!!!!! holaaaaa!!!!

Eric miró hacia atrás y le lanzó un besazo a Mel

- Hola preciosa mia!!! ¿que tal? oye veo que te gusta mucho mucho pero que mucho los cantajuegos no??

Mi cara calló de verguenza que tenía.

- buafh tito.. eso ya lo sabesss...!!! mami se creía que no edas tu... pero yo le dije que sí! que tenía mi poni rosa...

Eric miró hacia atrás del asiento y cogió el pony, sonrió y se lo enseñó a Mel.

- Si Mel, aquí está lo quieres??

Tenías que ser tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora