Changement de lame, nouveau dessin.

Capítulo 23- Celos Everywhere

( Y todos los fantasmas de antes...)

[...]

-¿¡Que!?-

-¿Desde cuando están ahí?-

-¡Iván ya tiene a Mylenne!-
Dijo Alya molesta, creo que no soporta la idea de que su shipp muera.

-¿Me están escuchando?-

-¿Porque te gusta Iván?, nunca antes habían hablado, entonces ¿Porque?, ¿Como ocurrió esto?-
Pregunto Mari dramáticamente al teñido.

-Tranquila, seguro es un malentendido, ¿Verdad? Ema?-

-¡Gracias!, por fin alguien al que le importa lo que tengo que decir. Por eso te quiero Adrien...-

-¡Espera!-
Grito Alya interrumpiéndome. Todos la miramos atentos, tal vez también me apoye.

- ¿¡Te gusta Adrien!?-
Bien, retiro dicho.

Ahora por su culpa Marinette me mira molesta y no la culpo. Tal vez ya me mato más de mil veces en su cabeza.

Adrien me miro muy sorprendido y claro, ¿Como no estarlo?, no es normal que te digan que le gustas a tu mejor amiga ¡Cosa que no es cierta!

Nino y Alya nos veían como esperando alguna reacción o para evitar que Marinette me matara realmente.

Nathaniel estaba viéndome sorprendido.

-¡No es cierto!, ¡A mi no me gusta Adrien!-
Todos menos Adrien  soltaron un suspiro.

Adrien hizo cara de »Claro, eso es imposible. Era muy obvio, ¿Como pude tomarlo enserio?«

-En todo caso, seria a Chat.-
Pensé, debemos aceptar que Adrien es el kawaii y Chat el sexi, ¡Nadie puede negarlo!

-¿A Chat?-
Preguntó Mari.

-¿Que?-

-Tu dijiste, “En todo caso seria a Chat”, ¿Te gusta Chat Noir?-

-¿¡Que!?, ¡No!, ¡Por favor, seria lo mismo!-
Adrien cubrió mi boca con sus manos, cuando entendí porque, puse mis manos arriba de sus manos como si eso fuera a ayudar en algo. Casi lo digo.

-Je je je, no. A Ema no le gusta el grandioso Chat Noir. Eso es imposible.-

Todos miraron a Adrien con cara de »¿Por que debería creerte a ti?«. Por lo que me miraron.

Yo asenti y quite mis manos y luego quite las del teñido para poder hablar.

-Apoyo a la rubia, a mi no me gusta Chat pero debemos admitir que no esta nada mal.-
Mire a Mari con cara picara recordando aquel hermoso día.

Adrien y Mari me miraron raro, unos cinco segundos después  Marinette se cubrió la parte de los pechos y su cara exploto de vergüenza. Estoy segura que le salia humo de los oídos.