XII

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Maratón 2/2

De repente, los tres se detuvieron de golpe.

-Aquí entrenarás unos días con Gabriel y otros días con Rafael y si ninguno puede, irás conmigo o con alguien calificado- Miguel se dio vuelta hacia los otros dos "arcángeles".

Aún no creo que sean eso.

-Ustedes traten de no ser muy duros con ella-bromeó y luego se retiró con Isis.

-Bien- Rafael llamó mi atención- es hora de tu entrenamiento, ángel.

-Esta bien- respondí algo avergonzada

¿Ángel?....¿será que él fue el que me dejó el oso de felpa con el collar?......Debo averiguar.

Gabriel me agarró el hombro haciendo que salga de mi mundo.

-¿Estás bien?- preguntó preocupado.

-Si...sólo estaba pensando- dije casi susurrando.

-¿ En qué tanto piensas que te veo colgada* todo el tiempo?- sonrió levemente haciendo que me sonroje.

-Cosas....- miré hacia el suelo- Espera dijiste ¿"colgada"?.

-Si,todo el tiempo- asintió.

Oh oouh.....

-Lo siento si dijeron algo- respondí y ahí fue cuando me di cuenta que estaba sola con Gabriel de camino al entrenamiento.

Caminé detrás de él, saludaba a todos como si fuera el jefe del lugar, levantaba su mano o solo asentía con la cabeza, yo solo observaba desde atrás sintiendo que yo no pertenecía aquí, se detuvo frente a un saco de boxeo.

-Aquí es donde te enseñaré a dar buenos golpes.-le dio un par de palmadas al saco.

Solo me limité a asentir.

-¿Es cierto que soy un arcángel?-solté.

Él me observó unos segundos antes de contestar.

-Si, y salvaste la vida de alguien, por eso eres un arcángel, pero no eres tan poderosa como Rafael o como Miguel o como yo, ese poder te lo ganas protegiendo vidas.

-Entonces si estoy muerta.-hable sin creérmelo.

-Exacto

Me tomé unos segundos para digerir todo:

Al final yo empujé a Theo, el auto terminó atropellándome a mi, le salvé la vida, por la mía.

Esto es tan raro.

-Bien, ahora quiero que me des tus mejores golpes.-palpó la bolsa.

Me estaba apunto de ponerme los guantes, cuando Isis y Rafael volvieron a hacerse presente.

-Miguel va a hacer una reunión, los solicita de inmediato.-dijo con su voz agitada, parecía que hubiera corrido.

-De acuerdo.-tanto Rafael como Gabriel asintieron.

Isis volteó a verme y me regaló una de sus cálidas sonrisas como saludo, le contesté de la misma forma.

-¡Ian!-gritó Gabriel, haciendo que pegue un brinco.

Del otro lado del gimnasio, Ian dejó de pegarle al saco de boxeo, se volteó, su mirada se topó con la mía, pero no sentí nada, admito que cuando alguien guapo té mira te pones nerviosa, pero solo eso, yo ya sentía algo por otra persona.

Sin darme cuenta, Ian ya estaba al lado de Isis.

-¿Qué desea señor?-sonrío, estaba rojo por el ejercicio.

Isis se tensó al tener a Ian a su lado, inmediatamente un intenso rubor cubrió sus mejillas, agachó su cabeza y trató de ocultarlo con su largo pelo.

-Necesito que entrenes a Scarlet.-Gabriel pasó su brazo por mis hombros, miré a Isis inconscientemente, una pizca de celos la invadió, lo supe por sus ojos, pero rápidamente como vino se esfumó.

-A la orden señor.-Ian hizo un saludo militar, sacando una risita de Isis.

Se dio vuelta hacia mi dirección.

- Ahora, piensa que esta cosa de aquí es la peor persona que ha conocido- dijo apuntando al saco de boxeo que había frente a mí.

En ese momento recordé a Damon golpeando a Theo como si hubiera hecho algo, la rabia por lo que hizo me invadió y di un golpe al saco haciendo que choque contra la pared que había detrás.

-Wow, tranquila todavia no te pusiste los guantes- Rió.

- Lo siento- dije secamente mirando al suelo.

-Esta bien, toma póntelos- dijo entregándome los guantes.

Los tomé y me los puse sin decir una palabra, en ese momento tenía rabia, enojo, tristeza, desesperación, pero sobre todo decepción.

-Bien , lo hiciste excelente todo los ejercicios- me felicitó mientras me palmeaba la espalda.

Yo estaba sentada en las bancas que habían ahí con una botella en mi mano izquierda y con la mirada perdida en el suelo.

-Veré si ya terminó la reunión de Miguel para que Gabriel te indique qué más tienes que hacer- informó Ian, soló asentí.

Estaba perdida, triste y desesperada.

Sentí que alguien se sentaba al lado mío en la banca, levanté la mirada hacia la dirección del sujeto, me encontré con los bellos ojos claros de Gabriel.

-¿Cómo estás?- preguntó mientras tenía su mirada fija hacia mí.

-Bien, estuve bien en el entrenamiento- respondí sentándome mejor.

-No te hablo del entrenamiento... - agregó preocupado-Sabes de lo que hablo realmente.

Volteé lentamente la mirada hacia el suelo e hice una mueca de tristeza.

-Estaba pensando un poco en todo esto y en otras cosas- solté luego de un silencio incómodo.

-¿Qué cosas?- preguntó nuevamente.

- Damon, mi mejor amigo...,- solté un suspiro- Cosas increíbles....

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Maratón 2/2

¡Hey! ¿Cómo han estado? aquí les traigo otro capítulo, como dije antes he estado editando asi que puede que este más cortito; espero les haya gustado.

Pd: les recomiendo pasar por la historia HOLA, EXTRAÑA  de mi querida Florqueseyo 

Nos vemos mis amadisimos lectores.

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