La habitación se encontraba en completó silencio, la tranquilidad era ininterrumpida únicamente por el tic tac de un viejo reloj de pared que anunciaba que eran las cinco de la tarde. Alex se encontraba acostado en un sillón para nada cómodo mirando un punto fijo del techo bajo la atenta mirada del psicólogo que el gobierno le había asignado y que había aceptado ir bajo la insistencia de su madre.
Era la segunda cita que tenia con el psicólogo y seguía sin decir una palabra.
-Yo no necesito un loquero madre- había dicho Alex cuando Emile le informó de la cita con el médico.
Ella estaba preocupada por su hijo, lo veía cada vez mas cansado y podia escucharlo murmurar entre sueños. Ella quería lo mejor para él.
-Alex- dijo el psicólogo sentado en su sillón de cuero marrón oscuro.-Ya es la hora.-
Alex sintió que era libre, finalmente podia salir de ese consultorio e ir a buscar a Clara para pasar juntos.
-Buena charla- dijo irónicamente él al tiempo que se levantaba y salia del consultorio.
Alex ajustó su abrigo al tiempo que empezaba a caminar por las oscuras y solitarias calles de su pueblo, el invierno cada vez se notaba más y la noche llegaba cada día mas temprano.
"...pobre iluso. Tiene mas problemas que yo..." Alex recuerda lo que su amigo le habia dicho en una de sus tantas cartas hablabdo de su tratamiento.
-¿Cómo te fue?- preguntó su madre al verlo entrar por la puerta principal, él no contestó. No iba a hablar de como estaba desperdiciando dinero y tiempo en ese loquero al que él no necesitaba ir. -¡Alex!- llamo ella haciendo que este detuviera su marcha. -Solo quiero lo mejor para ti.-
Él retomo su marcha sin contestar. No necesitaba ir a un loquero y contarle sus problemas. Nadie iba a entender la clase de cosas que rondaban por su cabeza.
"...Amigo, estoy yendo a un loquero. No se que espera que yo le diga. Me acuesto en su diván esperando que el reloj avance escuchando su respiración y su insoportable golpeteo de la lapicera sobre su libreta. No se como la gente puede ir y contar toda su vida a un desconocido..."
Clara estaba hermosa. Era todo lo que Alex podia pensar mientras la veia acercarse a él usando un vestido rojo corto, su cabello en una trenza con apilques dorados resaltando en su cabello negro. Clara estaba hermosa. Él se sintió que no era el hombre adecuado para ella. Ella era pura vida mientras que él solo era un soldado que habia vuelto a casa.
Ella se detuvo varios pasos delante de Alex mientras lo observaba con detenimiento. Él usaba el traje de ceremonia de la milicia chaqueta azul con el logo de su unidad, camisa blanca y pantalon a juego.
-Protocolos- fue lo unico que dijo el al observar la mirada de Clara quien le regalo una media sonrisa y lo ayudo a acomodarse la chaqueta.
La boda de su amigo fue sencilla y cargada de sentimientos. Alex se sintió feliz por él. Se merecia ser feliz después de tanto tiempo, después de pasar cada noche pensando en el dia que por fin dieran el si.
XXX
Nuevamente es medio corto lo lamento intento actualizar seguido pero la facultad no me deja. Solo eso espero les guste.
Besitos!
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Mi soldado.
Romance-Yo quiero ir contigo-decia el pequeño de tan solo seis años. -Aún eres muy pequeño Alex.-dijo su padre.-Cuida de tu madre.-Pidió. Esa fue la última vez que el pequeño Alex vio a su padre hasta el dia que llegaron y les dieron la notícia. El gen...
