Capítulo Veinticuatro: Por Ésa Razón

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Isabela

-Perdóname, primita. No estaba al tanto-

-El restaurante no merece gente inepta- dije furiosa -Dile a tu empleada que si no sabe mantenerse en la Tierra y abre las piernas cada vez que ve un chico guapo, es mejor que se largue-

-¿Quieres que haga algo?-

-Está demás decirte lo que quiero, ¿No crees?-

-Enseguida se cumple tu orden-

-Gracias Marco-

-Mandé unas flores a casa de Logan. Espero que luego pueda verlo y pedirle disculpas a él y a su familia en persona-

-Lo prometo- asentí

-Perdóname, Bela. No volverá a pasar-

-Por favor- negué y colgué

Di una vuelta para por fin llegar a mi casa y estacionar el auto.

-¿Qué te dijo Marco?- preguntó Anna

-Que se deshará de la culpable- negué

-Vaya. La furia que eres capaz de tener nunca la quiero en mi contra- sonrió

-No- negué sonriendo -Gracias hermanita-

-De nada- negó y besó mi frente -¿Entramos?-

-Sí- asentí

Bajé del auto con mi hermana y de inmediato bajaron mis padres a recibirnos, ellos también estaban preocupados por mi pequeña amiga.

-¿Cómo están?- preguntó mi madre -¿Y Fanny?-

-Está en casa- sonreí

-Está perfectamente bien- asintió Anna

-Gracias al cielo- sonrió mi padre

-Hemos comprado un gran regalo para ella- dijo mi madre -¿Puedes llevarnos a su casa?-

-¿¡Qué!?-

-Bela- dijo mi madre -¿Qué pasa?-

-Nada- negué asustada -Es solo que me parece algo precipitado ir a casa de los Hemsworth. Ahora quieren descansar, no me parece que...-

-Tonterías- dijo mi padre -Los Williams nos caracterizamos por ser una familia unida. Es justo que lo demostremos a los Hemsworth también-

-Pero...-

-Ya está todo- sonrió Hanna saliendo de casa

Gabriel traía un oso grande en sus manos, Austin llevaba una caja rosa grande y hasta Danna estaba sonriendo mientras llevaba un gran pastel en sus manos.

Santo cielo.

-¿No pensaban preguntar antes?- los miré

-No- sonrió Danna -Creo que será una buena oportunidad para pedir disculpas-

-¡Bela!-

Miré a Hayden quien venía caminando con una caja rosa en sus manos también.

-¿Qué rayos?-

-Hanna me llamó y me invitó a la fiesta en casa de los Hemsworth-

-¿Qué?- negué -No-

-¿Por qué no?- preguntó Danna

-Oye- dijo Hayden -¿Todos iremos?-

-Sí- asintió mi madre

-No es mejor comer aquí- sonrió -Después de todo, somos nosotros quien estamos pidiendo disculpas. ¿No sería mejor preparar un banquete aquí?-

Isabela, la niña buena ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora