4 2 0🍀

0 2 1

0 2 1

• • •

— Axel, ¡¿Podés masticar con la boca cerrada?! — preguntó Midel con una cara de fastidio impresionante.

— No. — negó.— Ustedes sigan hablando normal eh. — contestó metiendo otra cucharada de helado a la boca.

— No entiendo porque está masticando el helado.— dijo Frijo riéndose mientras miraba a Klave, el cual le hizo una seña para que se callara.

— Yo ni entiendo porque está acá.— volvió a hablar Alexis, recibiendo un fuck you por parte del otro.

El mayor de los tres se levantó de donde estaba para tomar a Emanuel del brazo y poder ir al living a conversar tranquilos.

— ¡Eu!— gritó Axel con la boca llena, llamando la atención de los dos.— Ojito vos eh.— señaló a Midel de forma amenazante. Este solo blanqueó los ojos.

Fueron directo al sillón dejando solo en la cocina al chico de las expansiones. Un silencio incómodo se interpuso entre ambos. Ninguno tenía algo para decir, al menos algo que sea coherente para la situación.

— ¿Y? ¿Qué querías decirme?— la voz de Frijo solía ser angelical la mayor parte del tiempo. Eso era algo que al más alto le encantaba.

Alexis sonrió. Le era imposible no hacerlo si pensaba en lo dulce que Emanuel podía llegar a ser.

El menor chasqueó sus dedos logrando sacar a Midel de sus pensamientos. Automáticamente se puso serio para contestarle.

— Te extraño.— suspiró.— Eso quería decirte.