Llegaré a tu corazón

Capitulo 15: No lo has superado

Capitulo 15: No lo has superado

Claire

James intentó buscarme está semana, pero ni siquiera le he abierto la puerta. Que se vaya a abrazar a la estúpida, mentirosa, perra, sin cerebro y a mí que me dejé en paz. ¿Qué se creé que por pedir disculpas ya está todo arreglado?  Pues no conmigo eso no funciona así.  ¿Qué rayos me pasa? Estoy hablando como si él fuera mi jodido novio y no lo va ser nunca.

Solo ha pasado una semana y ningún hospital quiere contratarme. ¡Ni uno solo! ¿Acaso se han puesto todos en mi contra? Me he pasado visitando a mi hermana que cada vez su embarazo es más enorme, pero no le he dicho sobre mi despido porque luego tratará de mover cielo y tierra para conseguirme un empleo.  No es que sea malagradecida, pero yo quiero obtener mis logros por mis propios medios.

— ¿Estás saliendo con alguien? — pregunté por segunda vez a mi amiga sin creérmelo.  Yo había pensado que el engaño de su ex la había dejado fuera del mercado por un buen tiempo.  Espero que esté no la traicione porque entonces tendré que consolarla nuevamente.

—Sí, ya te dije que llevamos dos semanas saliendo — respondió tirando una caja de cereal al carrito de compras.

— ¿Ya te acostaste con él? — pregunté deteniendo el carrito de golpe y ella me dio una sonrisa pícara. —. No.  Lo tengo bajo prueba y luego me lanzó, pero todavía no quiero que piense que soy una zorra — respondió volviendo a caminar está vez por la sección femenina y la muy perra se detuvo frente a todos los preservativos.

—Yo que tú compraría una caja para cuando lo hagas con James, ¿Qué tamaño crees que la tiene? — pregunto Susy comenzando a leer una caja de preservativos. Por poco y me ahogó con mi propia saliva y quise golpearla con el carrito. ¿Cómo voy a saber el tamaño de James Junior? Además, ¿Qué me importa a mí su tamaño?

—Que las compré él de seguro lo necesita con la estúpida novia que se gasta — dije pasando de ella con rapidez y sintiendo que mi estómago se revolvía en tan solo pensar en ésa mujer.

— ¿Estás celosa? — corrió la pelirroja a toda prisa como lo hacían mis sobrinos.

— ¡No! ¡¿Acaso no me conoces?! — exclame fulminándola con la mirada y llevándome miradas de reprobación de parte de unas ancianas que hacían sus compras.

—Es que Claire estás actuando como una mujer celosa y cada vez que mencionó al rubio te prendes como el fuego, pero en tú caso solo para maldecirlo — me miró achicando sus ojos como si estuviera buscando una respuesta más allá de mis ojos.

—Pues te equivocas, Susana.  No estoy celosa porque James no me interesa — dije lo más segura que podía porque ése hombre no me gusta. ¿O sí?

—Pues entonces no te importa saber que lo estoy viendo parado escogiendo frutas — no hizo más que decir eso y me giré para buscarlo con la mirada.

—Pensé que no te interesaba, pero solo digo que está cerca y casi te sacas el cuello, pero despreocúpate tú James no está — añadió con una sonrisa burlona que me hizo hervir la sangre. ¿Para qué miré?