Llegaré a tu corazón

Capitulo 16: Dejame ser yo

Capitulo 16: Déjame ser yo

James

No podía dejar de mirarla y podía ver en sus ojos una profunda tristeza que yo quería quitar.   Quería ser yo el culpable de su sonrisa y que todas me las dedicará a mí.   Nunca me había sentido así por una mujer y me gustaba e desesperaba lo que estaba sintiendo. 

—Traje mi auto — respondió mordiéndose el labio y me dieron ganas se atraparlos para saborearlos. 

—déjalo aquí y luego te traigo a buscarlo — dije aproximándome a ella y la castaña luego de unos segundos asintió.  

 —Con una condición — decía caminando por el estacionamiento y yo a su lado.  

—La que quieras — dije sin pensarlo mientras le rogaba a Dios que no se le ocurriera alguna barbaridad para que yo hiciera.   —. Que me lleves a aquel lugar donde me llevaste hace poco — se detuvo mirándome sería y yo sonreí de medio lado.  Eso no era exactamente una condición para mí sería un privilegio volver a llevarla.

—eres una depravada quieres verme en bóxers otra vez — dije riendo y ella se quedó observándome seria.  —. Ok, es mentira — aclare rápidamente antes de que se arrepintiera y me diera un buen golpe.

Dentro del auto íbamos en silencio, pero no era tan malo por lo menos la tenía en el mismo espacio que yo sin que me estuviera gritando como una desquiciada. 

—Claire, ¿Por qué le tienes miedo a los espacios cerrados? — pregunté para encontrar algo de qué hablar y así conocer cosas sobre ella.  

—Porque cuando tenía once años me encerraron en unos de los cuartos de mantenimiento en el colegio y estuve un día enteró allí encerrada.   Fue una experiencia horrible — dijo mientras enviaba un mensaje de texto y me moría por saber a quién se lo enviaba.  El que me dijera algo así como lo que le habían hecho era un avance y me dieron ganas de saber cómo era de pequeña.  

— ¿Los castigaron? — ella soltó una carcajada y yo la miré confundido.

—No, porque el idiota que me encerró era hijo del socio de mi padre y él no quería que sus negocios se vieran afectados.   Así que me estuve que aguantar un año enteró las bromas pesadas de Jimmy — ya quisiera conocer al imbécil de Jimmy para darle unos cuantos golpes y al desgraciado de su padre.  

—Tienes un padre de lujo - dije con sarcasmo y ella asintió con un bufido. 

Ya estábamos frente a la playa y Claire se quito los tacones para que no fuera tan dificultoso caminar por la arena y yo hice lo mismo con mis zapatos.   Comenzamos a caminar en silencio por la arena y de vez en cuando Claire acercaba los pies al agua. 

— ¿Por qué insistes tanto conmigo, James? — pregunto de repente deteniéndose a mirarme.   Sus ojos marrones brillaban más de lo normal y no podía verse más hermosa gracias a la luz de la luna.   No me esperaba ésa pregunta de su parte y menos que me mirara como lo estaba haciendo.   No entendía su cambió repentino, pero esta Claire me gustaba.