Capitulo 5: Paciencia
James
¡Un mes y medio esperando que llegara y regresa hoy! ¡Hoy! Cuando por fin después de dos semanas no la había vuelto a ver. ¿Qué hecho para merecerme esto?
—Elizabeth, ¿Por qué no me avisaste que venias? — pregunte todavía sorprendido y ella se acerco a besar mis labios.
Elizabeth es mi novia desde hace tres años, pero últimamente viaja mucho con su padre por negocios y la relación se ha vuelto tan monótona que ya no suelo ni extrañarla. Antes de que se fuera a Escocia quise hablar con ella para romper esta tonta relación, pero ella ni siquiera vino a despedirse y yo tampoco pude hacerlo porque hubo una reunión de improvisto. Elizabeth era una mujer guapa, encantadora y muy inteligente. Cuando la conocí lo mas que me llamo la atención fueron sus grandes ojos color miel, además era una mujer delgada, estatura baja, su pelo era largo color negro y no tenía grandes pechos, pero eso para mí no es problema. Yo no soy el típico hombre que quiere estar con una mujer por su físico y nunca me va importar.
—Quería darte una sorpresa y llame a tu madre para saber dónde estabas. ¿Cómo está Annie? —pregunto acariciando mi mejilla y yo me relaje un poco para ver cuando la castaña aprovechaba el momento para irse.
—Ahora está bien. Fue diagnosticada con epilepsia y no puedo ni imaginar el grito que va pegar mi hermana cuando se entere — dije mirando por el rabillo del ojo a la castaña que salía por la puerta principal. Ella se apego más a mí para besarme, pero no podía perder el tiempo en un beso en este momento.
—Elizabeth discúlpame vuelvo pronto, ¿sí? — dije despegándome de ella sin darle tiempo a decir una palabra. Tenía que alcanzarla antes de que se fuera y perdiera la oportunidad de tenerla más tiempo cerca de mí.
Cuando salí mire para ambos lados viendo solo personas llegando enferma o alguna que otra ambulancia. ¿Se habrá ido tan rápido? ¡No puede ser si no tarde tanto! Camine apresurado escudriñando la salida y la vi en los portones de la salida. Esa chaqueta roja en su cuerpo bien definido la podía reconocer de lejos. Desde que la vi en la boda de mi hermano no he podido dejar de pensar en ella, en lo bien que le quedaba aquel vestido rojo y en su encantadora sonrisa. No puedo decir que estoy enamorado de ella porque sería un jodido embustero, pero si se decir que he pensado más en ella que en mi propia novia. Lo sé soy un infeliz por pensar en otra mujer que no conozco y tampoco queda nada mío.
Me he visto tentado varias veces de investigar todo de ella, pero simplemente no puedo por respeto a Elizabeth y porque me siento un acosador. Nunca había querido investigar a una mujer, pero esa mujer me intriga. Ninguna mujer me había rechazado como ella lo había echo y eso llamaba más mi atención.
— ¿pensabas que te iba dejar irte sola? Te dije que yo te llevaría y eso hare — pregunte después de haber corrido para alcanzarla y pararme frente a ella. Ella me miro poniendo los ojos en blanco y frunció los labios.
— ¿Cómo era que te llamabas? — pregunto poniendo una mano en su cintura y con la otra se quitaba el cabello de su rostro. ¿Enserio no se acordaba de mi nombre?
ESTÁS LEYENDO
Llegaré a tu corazón
Roman d'amour-FINALISTA DE LOS PREMIOS WATTY 2014- Claire no acepta enamorarse, eso no esta en sus planes y no esta dispuesta volver hacerlo. Ella es toda una mujer graduada en medicina y le apasiona ayudar a los demas. No confía en los hombres, porque dice qu...