Ella es mía ..... solo mía entendido.!

Capitulo #5

Lia

Desperté por los fuertes ruido que se escuchaban, me levante lentamente de la cama y me dirijo hacia la ventana ya que el ruido provenía del patio. Divise varias personas decorando el jardín, se dividían en equipos algunos montaban las mesas y las sillas, otros colocaban la decoración y al final estaban los que se encargaban de la música. Qué demonios significa todo esto, me coloque un vestido que había colgando en el perchero de la habitación, baje rápidamente las escaleras en busca de Leo, no lo encontraba y eso me desesperaba . Uno de los hombres de seguridad me dijo que estaba en su despacho y me mostro el camino hasta este. Entre rápidamente sin tocar la puerta.

--Por qué demonios entras sin tocar—me fulmina con la mirada

--Lo siento – bajo mi cabeza

--Ya entraste, ahora dime que se te ofrece – suaviza su mirada

-- Hay alguna fiesta hoy, es que me despertaron muchos ruidos y me fije que están decorando el jardín

-- A claro eso, están decorando para nuestra boda.

--Que bien – digo sin caer en cuenta, pero al hacerlo casi se me salen los ojos—nuestra queee –grito

--Anoche me quedo muy claro que quiero ser el único hombre en tu vida—se pone de pie y se acerca a mi peligrosamente—quiero que me pertenezcas por completo, no soporto la idea que otro hombre pueda tenerte.

-- Pee pero no será así, te lo he dicho antes no me interesa nadie. Además no soy un objeto para pertenecerte, el estar casados no me impedirá continuar con mi vida.

--Estas muy equivocada, harás solo lo que yo te permita.

--Lo que buscas no es una esposa, sino una sumisa.

--Ese es mi problema--- es un idiota, tengo tantas ganas de golpearlo. Pero recuerdo que si lo hago podría hasta matarme a golpes. Decido ceder es lo mejor en este caso.

--Pero aun no tengo el vestido.

--No te preocupes por nada ya todo está solucionado.—veo como se vuelve a sentar en su enorme silla.

-- Por qué tanta prisa Leo , sabes que día es hoy .

-- Si es martes, y la prisa es porque la semana próxima comienza la universidad y te lo advierto no te quiero hablando con nadie.

-- Pues es martes, las bodas suelen ser los fines de semana no en días de semana. Además como que no podre hablar, Leo sere la nueva es segundo semestre ya , estare perdida . Prometo hacer amistade solo chicas pero no me pidas que no tenga amigas sii—pongo mi mejor cara

--Solo chicas Lia entendido, y no somos una pareja como las demás

--Eso no pensabas la noche que me hiciste tuya—comento en susurros

-- Que dices—dice mirando directo a los ojos

--Que está perfecto, solo chicas. —salgo rápidamente del despacho de ese idiota, escucho si risa de seguro me escucho que vergüenza.

Subo rápidamente las escaleras para ir a mi habitación, al llegar a esta quedo en shock... Hay varias personas y un hermoso vestido de novia sobre la cama, esto es peor de lo que imagine. Todos me miran al escuchar el ruido de la puerta, yo me quedo estática viendo lo que hace cada uno de ellos. Algunos preparan los maquillajes hay otro con unas tenazas y en otra mano una plancha, y por ultimo quien esta combinando las accesorios con el vestido. Alguien me agarra del brazo.

--Hoo debes de ser Lía, ven cariño siéntate—comenta un hombre que por lo que puedo ver es gay

--Quienes son, además quien los ha dejado pasar a mi habitación—

--El señor Fuentes me ha permitido entrar. Y me presento soy Andrew, aquella de allá es Lisa la que se encargara de maquillarte, él es Teo quien te peinara y yo elegí el vestido espero que te guste hermosa. Asi que handa y dúchate que ya se nos hace tarde

-- Ho no, no me duchare sin antes hablar con Leo, permiso--- salgo y bajo las escaleras entrando nuevamente al despacho sin toca

-- Me estas empezando a hinchar las bolas, con un demonio no te enseñaron a tocar – comenta molesto, yo simplemente suelto una carcajada—

--Lo siento enserio, lo último que quiero es que se hinchen tus bolas—continuo riendo hasta me duele el estómago al ver su expresión

--Te parece divertido—pone cara de enojado pero puedo ver en su mirada que está a punto de reírse.

-- Es que no te imagino con las bolas hinchadas, no podrías ni caminar – se pone de pie y se acerca a mí, yo retrocedo hasta que choco con la puerta.

--La que no podrá caminar serás tú, hoy en la noche querida serás mi esposa y te daré tan duro que gritaras mi nombre sin parar, pedirás que te de duro a gritos—me sonrojo por completo, mis mejillas arden como nunca, el besa mi cuello –

--Eres un pervertido—lo aparto de un empujón el ahora ríe

--La pervertida la otra noche era otra—o Dios

-- Imbécil, además no pienso casarme si mis padres no están presentes – comento enojada

--De eso no hay duda querida, tus padres están en camino. Además estén o no presente te casas con migo, así tenga que llevarte arrastras a firmar la acta. Te deje muy claro que eres mía, y ahora lo serás por la ley.

--No soy una muñequita de trapo a la que puedes manejar a tu manera

-- Quizás, pero en todo caso serias mi muñeca – me agarra por detrás de la cabeza fuertemente y me besa a la fuerza – y poder hacer lo que me plazca contigo.

--Me lastimas, y no dejare que me trates como se te plazca. También se darme mi lugar. —digo apartándome

--Ha veo que quieres llevarme la contraria, sabes no dudo que sepas dártelo pero te aseguro que siempre las cosas serán como yo diga y me plazca que sean.

-- No entiendo porque me tratas mal, te prometí que sabré respetarte como esposo pero te empeñas en no confiar en mí.

--Confió en ti, en quien no confió es en los hombre, te has visto en un espejo, eres perfecta, tu cuerpo, rostro angelical, esa mirada penetrante y esa sonrisa tan maravillosa No sé qué demonios hiciste con migo que no puedo sacarte de mi cabeza están en ella todo el tiempo. Quiero ser solo yo quien pueda disfrutar de ti, pero te empeñas en salir, estudiar exponiéndote a que todos te ven, quisiera tenerte encerrada pero en esta casa.

--Es obsesión lo que tienes, créeme por Dios jamás podría engañarte. No puedes ser tan posesivo eso está mal, nunca me ha gustado la violencia .Además no quiero que estar estudiando cree problemas entre nosotros, conoceré muchas personas en la Universidad, quizás chicos se me acerquen pero me alejare de ellos eso ya te lo dije, lo que no quiero es que si me ves platicando con alguno te enojes quizás simplemente sea una pregunta o algo que ver con las clases pero prometo hablar algo que no tenga que ver la universidad. – me acerque suavemente a el

-- No no quiero que hables con otros chicos maldición, eres solo mía entiendes.

--Sé que lo soy no he dicho lo contrario, además en pocas horas seré tu esposa—digo intentando calmarlo, en realidad tengo miedo a que se vuelva a poner violento o se altere. Pero de lo que tengo ganas es de agarrarlo a bófetas a ver si se le quita lo idiota.

--Hablando de la boda, que esperas para arreglarte. Ya solo faltan pocas horas así que sube y arréglate quiero que te veas como una muñequita, mi muñequita entiendes

-- No me hables así quieres, no te cuesta nada se un poco cariñoso – dicho esto salí de ahí muy molesta. Subí a mi recamara y hay están todos esperándome, antes de ducharme me dirijo a la ventana a ver el patio, ya no se podía ver nada, habían colocado una enorme carpa que cubría todo lo que había visto antes. Me di por vencida y entre a ducharme, fue una ducha muy larga. Literalmente me depile todo, no se el por qué pero las palabras de Leo no salían de mi mente... [La que no podrá caminar serás tú, hoy en la noche querida serás mi esposa y te daré tan duro que gritaras mi nombre sin parar, pedirás que te de duro a gritos''