Hanna esta enamorada de alguien a quien cree conocer...
¿como saber si lo que siente Harry por ella es real?
Portada hecha por @epicnaill (gracias por la portada, me encanto!)
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Mi garganta ardió de nuevo pero no tan intenso como la primera vez, dejo el vaso y le sonreí al tipo del bar. Me alejo y vuelvo a la pista, me siento decidida, le daría a Harry una cucharada de su propia medicina, voy hasta la orilla de la pista justo a la vista del rizado y me pongo de espaldas a el, comienzo a alzar las manos y a mover las caderas al ritmo de la música, still got time de zayn suena fuertemente por lo que adquiero un ritmo más lento, giro un poco la cabeza con una sonrisa y noto sus ojos en mi con curiosidad, cuando ve que soy yo puedo notar que los abre ampliamente en sorpresa, le guiño un ojo y vuelvo a darle la espalda.
Me siento extraña haciendo esto pero algo me daba valentía y sé muy bien que es, aún así, con valentía y todo no puedo evitar asustarme cuando alguien coloca las manos en mis caderas, mi giro rápidamente y veo a un completo extraño sonriéndome, comienza a bailar y me atrae a él, nos encontramos muy juntos por lo que debido a la cercanía estoy un poco congelada, aunque al rubio qué pasa sus manos por mi cintura no puede importarle menos, miro de nuevo hacia arriba y noto que el lugar donde estaba sentando Harry está vacío, mi corazón empieza a ir rápido así que quito las manos del rubio y me separo de el, giro para salir de la pista pero no puedo ir tan lejos ya que choco con alguien.
—¿Donde te habías metido Hanna?— reclama Dani.
—Es tu culpa, subiste sin mi y no me dejaron pasar porque no tenía el maldito sello— me cruzo de brazos formando un puchero, aún así una sonrisa se quiere asomar en mis labios.
—Espera— se acerca a mí y me ve con los ojos entrecerrados—. ¡Tomaste, maldita!
—Solo un poco— sonrío inocentemente.
—No puedes emborracharte aquí, qué tal si alguien se aprovecha de ti— dice regañándome.
—Lo siento, no lo volveré a hacer, solo fueron dos ¿o cuatro...?— entrecierro los ojos recordando.
—¿Cuatro que?— miro a otro lado pero Dani vuelve a repetir la pregunta.
—Dos vasitos de los chiquitos, ¿shots?
—Ay dios, Hanna— rueda los ojos—. Quieres seguir aquí, ya es la 1 y como no estás tan acostumbrada...
—Noo, todavía quiero subir— hago pucheros.
—Si que te cayó el alcohol— susurra—. Bien, vamos.
Me toma de la mano y caminamos hasta las escaleras, el guardia me reconoce al instante y puedo notar un poco de vergüenza en su rostro. Le saco la lengua infantilmente y sigo a Dani quien me jala por las escaleras.
Dios, ¿por qué me comporto así?
El piso de arriba es aún más elegante sin perder el toque juvenil, las paredes son rojas y había sillones en las esquinas, candelabros cuelgan del techo y a diferencia de abajo no hay pista, todos bailan donde se les da la gana. Hay como un cuarto de gente de la que estaba abajo y eso me gusta ya que es menos sofocante, Dani me sienta en el sillón que reconozco porque era donde Harry estaba sentado anteriormente.
