Capítulo 58| Siempre fui chica, imbécil

27.7K 1.8K 605
                                    

Otra cosa, tomaré todas las preguntas y haré el Q&Q después de este cap. Tienes tiempo para decir sus dudas sobre la historia. Solo digo que después de publicar el final no anden preguntando, pa' que sean serios.

Este cap es algo cortito, sorry

***

El fin de semana en la cabaña fue increíble en todos los aspectos, haber estado dos días a solas con Tyler fue lo mejor que me pudo haber sucedido.

Con respecto a Ethan, sí fue aceptado en su dichosa academia de modelaje, aunque no me quiso decir en donde será, solo espero que no se separe de nosotros. Pensar en que mi hermano, Ethan y Tyler ya tienen sus carreras universitarias aseguradas me pone... triste. No lo sé, solo no estoy segura de qué camino tomar, temo equivocarme en mi decisión, además aún quedan un par de meses para escoger mi carrera, la opción de mi empresa de limones sigue en pie.

Estoy demasiado nerviosa, hoy será mi primer partido como chica, es decir, siempre fui chica, pero ahora todos lo sabrán. En un par de minutos comenzará el juego, por lo que el entrenador solo nos ayuda con nuestra concentración. Simplemente quiero hacerlo bien, poder demostrarles a todos que soy una gran jugadora.

—... Chicos, deben mejorar su precisión al correr, caen demasiado brusco... —sigue con su sermón el entrenador.

Los chicos en serio han estado flojos en la precisión, creo que deberían hacer algo para mejorarla. La mía está en su punto, debido a que soy más flexible que ellos gracias a la gimnasia, aunque mi resistencia se encuentra baja. Comer pizza cada tanto no es que ayude mucho.

— ¡Hey! Tranquila, pequeña, todo estará bien —Tyler pasa uno de sus brazos sobre mis hombros, brindándome apoyo moral.

Parpadeo saliendo de mi trance, para después sonreír de forma forzada. Él planta un sonoro beso en mi mejilla, antes de sostener con fuerza su casco. Me resulta reconfortante su forma de intentar calmar mis nervios.

—Eso espero —dejo escapar un suspiro, apegándome más hacia él.

Dexter termina su discurso motivacional, haciendo sonar sus palmas fuertemente. Mis compañeros de equipo sueltan gritos con expresividad, antes de salir para el campo. Una exhalación sale de mis labios, hora del espectáculo.

Las luces iluminan todo el lugar, los gritos efusivos del público resuenan entre el bullicio. Mantengo mi mentón en alto, pasando saliva, aunque mis piernas se sientan gelatina. Mi casco lo sostengo con mi mano, trotando en dirección a los chicos. Este partido será contra los Lagartos, ¿irónico? Tal vez. A pocos metros de distancia las miradas de todos se posan en mí, lo cual me hace sentir aún más abrumada. Llevo un mechón de mi cabello tras mi oreja, dejando el resto libre. Observo como Liam –el quarterback de los Lagartos y el mismo chico con el cual peleé– eleva una de sus cejas, una sonrisa burlona se posa en sus labios. Este da un paso adelante, de inmediato Tyler y Nick pasan sus brazos alrededor de mi cintura, fulminándolo con la mirada.

— ¿Con guardaespaldas, preciosa? Creo que deberías intentar ser una princesa como querías de niña, ¿no? —su comentario me hace reír.

—Para tu información, quería ser la power ranger amarilla. —me encojo de hombros, diciendo la verdad.

Varias risas se hacen presentes. Siempre quise ser un power ranger, con Tyler y Nick jugábamos a serlo. Me resultaba gracioso, todavía más cuando movíamos con demasiada efusividad nuestras extremidades incluso cuando no estábamos jugando, parecíamos poseídos.

— ¿Y si te sientas para ahorrar tiempo? —inquiere con ironía, haciendo que mis amigos y mi novio suelten varios gruñidos.

— ¿Y si te pego un tiro para ahorrar aire? —sonrío sarcásticamente, causando las carcajadas de muchos y los gruñidos de otros. El castaño aprieta la mandíbula, antes de dar un paso más al frente.

Instituto de Hombres [#1] EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora