¿Realmente puedo amarte? [One Piece]

CAPITULO 1 LA CACERIA

Un día cualquiera, el sol estaba en máximo esplendor, personas de todo el mundo iban y venían de los puertos hacia la isla conocida como dressrosa, entre esas personas se encontraba ____ quien a primera vista parecía una chica alegre y un poco distraída, pero detrás de una inocente mirada escondía una aterradora personalidad.

____: ¡Wow! Cuanta gente hay aquí y que de cosas hay por ver. -Dijo mirando a su alrededor- Primero iré a los festivales, después de compras y al último iré a comer en uno de los mejores restaurantes de la ciudad el "ángel caído"

Por otra parte, en el palacio de dressrosa...

Baby5: Joven amo, la merienda esta lista.

Doflamingo: Sí, iré en un momento. -Dijo el rubio dejando unos papeles en su escritorio-

Doflamingo se dispuso a retirarse de su oficina, pero una llamada interrumpió su salida, un poco molesto se preguntaba quien era ya que no tenía llamadas pendientes durante el día.

Doflamingo: Soy yo. -Dijo con seriedad-

Diamante: ¡Hey doffy! Has estado trabajando mucho estos días porque no salimos esta noche y nos divertimos en el camino. -Dijo alegre-

Doflamingo: ¿Dónde estás? -Pregunto-

Diamante: ¡Me encuentro en un casino! ¡Ponte elegante, iremos de cacería! ¡Te veré en el restaurante "ángel caído"

Doflamingo: Bien te veré esta noche. -Dijo bajando la bocina y mostrando una gran sonrisa maliciosa- Me vendrá bien salir esta noche, necesito despejar la mente.

El día termino rápido y a pesar de que ____ quería llevarse todo de cada una de las tiendas solo podía llevarse lo esencial entre ellos un vestidos que usaría para ir a cenar. Al igual que ella doflamingo se estaba preparando y pasarla bien con su colega sin saber que el destino de ambas personas estaba a punto de cambiar.

Restaurante "ángel caído"...

Tras hospedarse en el hotel más cercano y haber dejando todoas sus cosas, ____ entro al restaurante el cual era completamente elegante para aquel que entraba por primera vez, fue atendida como una reina y llevada a su mesa por un apuesto mesero quien estaba a sus ordenes. Diamante esperaba a doflamingo quien nada mas llegar ambos entraron llamando la atencion de todos en el restaurante excepto ____ quien estaba concentrada en la carta y que era lo primero que comería.

Los comensales miraron asombrados a los hombres altos bien vestidos y las mujeres del lugar no podían dejar de ver lo apuestos que eran, ____ miro por encima de la carta para saber quienes eran, pero les tomo poca importancia. Doflamingo observo a su alrededor hasta toparse con ____ quien estaba mirando hacía otra parte, ella podía sentir su mirada aun por debajo de sus gafas lo cual la molestaba un poco.

Diamante: ¡Oh! ¿Te gustan las presas fáciles doffy? -Pregunto-

Doflamingo: No te confundas diamante, las presas fáciles son las más difíciles de cazar. -dijo volteando a ver a diamante-

La cena de los tres continuo la musica armonizaba el lugar haciendo que el lugar y la comida fueran de lo mejor no fue hasta que un grupo de bandidos entraron acorralando el lugar y los comensales empezaran a asustarse.

Bandido: ¡CUALQUIERA QUE INTENTE ESCAPAR SERA ASESINADO! ¡TODOS ENTREGEN SUS PERTENENCIAS DE VALOR!

Doflamingo y diamante no hicieron caso a su petición y siguieron cenando como si ellos no existieran, uno de los bandidos paso por la mesa de ____ quien estaba cenando como si nada y este tomo asiento frente de ella intentando llamar su atención.

Bandido: ¡Oye hermosura! ¿Por qué no viene con nosotros a divertirte un rato, eh!

Inmediatamente doflamingo se percató que estaban coqueteando con su presa, dejo de cenar y observo atentamente la escena.

____: Que lindo que te hayas fijado en mi pero, no me gustan los de tu tipo. -Dijo divertida mirando su copa de vino-

Bandido: ¡Los de mi tipo! -Dijo molesto tirando los utensilios de la mesa- Puede que seas una belleza, pero no eres consiente en la situación en la que te encuentras ¿verdad?

____ miro a su alrededor, había gente asustada y bandidos armados en cada una de las salidas, se mostro indiferente y lo miro fijamente con una sonrisa. 

____: Y bien ¿Eso debería asustarme? -Dijo segura de sus palabras-

Bandido: ¡Maldita! -Dijo Tomándola del vestido dándole un rodillazo en el estómago y tirándola contra la mesa donde había cenado. ¡Maldita mujerzuela!

____ se encontraba muy molesta y sobre la misma mesa donde estaba cenando su vestido fue manchado por el vino que había bebido, el bandido se dio vuelta y esa fue la peor cosa que pudo haber hecho. Ella se levanto y camino detrás de el sin que se diera cuanta de sus pasos y al darse nuevamente vuelta ahí estaba ____ mirándolo fríamente por unos segundos hasta que el hombre sintió un dolor en el pecho, lo había apuñalado sin darse cuenta, después una sonrisa maliciosa se marco en el rostro.

____: Los tipos como tú me dan asco, así que para deshacerse de ellos hay que exterminarlos -dijo sin dejar de sonreír-

El bandido cayo el suelo y sus colegas apuntaron sus armas a ____, quien al mirar sus manos llenas de sangre, camino hacia la salida como si nada hubiera pasado hasta que se escucho de fondo un voz masculina y molesta.

Bandidos: ¡Disparen!

Balas se dirigían hacia ella a gran velocidad pero ella era más rápida, tomo las mesas que estaban a sus laterales usándolas como escudos, al cesar los disparos pateo las mesas contra los bandidos dejándolos inconscientes, al igual que las sillas del lugar fueron usadas como medio de defensa sin que ninguno de los comensales fuera lastimado en el acto. ____ salió tranquilamente del lugar ya que había escapado unos cuantos y tenía que ir tras de ellos. al entrar a un callejón sabía que la estaban esperando y en cuanto estaba en lo oscuro atacaron al mismo tiempo. El primero quiso apuñalarla por la espalda, el segundo le quiso disparar, pero esquivo a ambos y los lanzo uno contra el otro matándose entre sí. Solo quedaba uno pero en una fracción de segundo se escucho un disparo y un fuerte dolor en su lado izquierdo. Su vestido comenzaba a teñirse de rojo y al darse vuelta estaba el hombre que le había disparado, eso la hizo enojar el silencio se volvió incomodo hasta que se escuchó un grito masculino.

Todo había terminado o eso creía, su vista estaba borrosa y estaba cansada por la perdida de sangre, camino fuera del callejón sujetándose de las paredes, sus pies pesaban que con un pequeña piedra cayo de frente, la fuerza de la caía le impidió levantarse. Escucho pasos acercarse por lo que intento levantarse o levantar la mirada y saber a quien tendría que enfrentarse por ultima vez, pero todo se volvió oscuro, solo pudo sentir que alguien la sostenía y un cálido calor envolvía su cuerpo.

El hombre que la cargaba en brazos la miro seriamente y aun así no dejaba de pensar porque lo estaba haciendo o que había hecho ella como para que la ayudara, la miro un par de segundos más y después se dirigió a conseguir ayuda.