Lunasticio de dos Lunas

Capítulo 3 -Entre caza, preguntas y verdades. -A ojos de Jasper

EdwJake caminó delante de nosotros, siendo Emmett quien lo alcanzara, siguiéndoles muy de cerca; el chico se encontraba aun con los sentimientos encontrados, dándome a entender que por más que riera ante las ocurrencias de mi hermano, seguía aturdido por lo que le había sucedido en la casa de los lobos y por consiguiente, lo que ocurrió con sus padres.

Padrino y ahijado se comenzaron a empujar, tratando de ganar la primera carrera del día, siendo yo quien me valiera de su tonto e infantil jugueteo, saltando entre los árboles, escuchando las palabrotas que Emmett me gritaba a lo lejos, al darse cuenta de las triquiñuelas que usaba en contra de ellos.

En la distancia pude percibir el temor de una gacela, dejándola huir de nosotros, ya que para mí, era una presa realmente fácil de cazar, aunque a lo mejor, aquel deseo era más ante la costumbre de dejárselas a mi hermosa Alice, ya que eran sus favoritas.

Me arrojé al terreno a penas divisé a Emmett, consiguiendo que el musculoso vampiro cayera al suelo, percibiendo el silbido de las esferas de metal de EdwJake, quien se acercaba hacía nosotros a gran velocidad. Aquellos jugueticos metálicos iban dirigidos hacia mis piernas, haciendo un giro completo hacia atrás, logrando esquivarlas sin problema alguno, cayendo con total gracias sobre el suelo, volteado rápidamente para ver como mi sobrino se aproximaba a toda velocidad, tratando de impactar violentamente en contra de mi cuerpo.

Me agaché, estirando mis piernas para derribarlo, pero el chico ejecutó una perfecta parada de manos, casi sin tocar el suelo, esquivando mis extremidades inferiores, retomando la carrera, siendo yo quien corriera tras él, percibiendo los sentimiento de Emmett quien se dispuso a atacar a un enorme oso muy cerca del riachuelo que dividía la reserva con nuestro territorio.

—Pedazo de mocoso... eso es TRAMPA. —Espetó Emmett en la distancia, percatándome desde uno de los riscos, como el chico había espantado al oso, consiguiendo que las tres esferas de metal, cayeran de golpe en el agua, haciendo que el animal saliera asustado a orillas del lago.

EdwJake no pudo dejar de reír, palmeándole la espalda a su tío, el cual le empujó de mala gana, consiguiendo que el chico cayera al agua, sabiendo de antemano que EdwJake no se quedaría tranquilo, aferrando a su tío/padrino de los tobillos, consiguiendo que cayera junto con él, comenzando una lucha de nunca acabar.

—¡Niños! —Exclamé arrojándome del risco hacia el lago, cayendo sobre una enrome roca y de allí a tierra firme, comenzando a perseguir al oso que Emmett había dejado escapar. —La presa se escapa.

No había transcurrido mucho tiempo cuando se volvió a escuchar el silbido del viento ante la velocidad con la que se transportaban las esferas, arrojándome pecho tierra, observando cómo los jugueticos de EdwJake pasaron fugazmente, levantándome de un solo salto, retomando la carrera, percatándome de que el oso comenzó a correr hacía mí, virando de repente hacía la izquierda al verse acorralado por Emmett que venía tras de él y por mí que iba de frente a su encuentro.

Me barrí sobre el suelo, derribando a Emmett como si yo fuese una bola de billar y él un simple pino, levantándome tan rápido como mis dotes de vampiro me lo permitieron, corriendo nuevamente detrás del oso, sintiendo la rabia de Emmett al haber sido derribado por mi persona por segunda vez.

Percibí la presencia de EdwJake, quien me siguió muy de cerca por mi flanco derecho, mientras que Emmett venia un poco más atrás por el izquierdo.

El oso ya no daba más, se encontraba realmente cansado, comenzando a convertirse en un blanco Fácil, algo que sin duda a mi no me agrada y me aburría demasiado.

Me aferré a uno de los árboles, saltando sobre este y luego sobre el siguiente, cayendo agazapado en el suelo, quedando frente al gran oso, el cual se detuvo, irguiéndose sobre sus dos patas traseras, dejando que fuese Emmett quien se ganara el premio mayor.