CapÍtulo 15 -¿La ciudad del amor o los suburbios del odio?

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A ojos de Klaus

No podía creer lo que mis ojos estaban viendo, el rostro de Rajky se desfiguró considerablemente, sus dientes habían crecido como los de una bestia salvaje, la cual rugió no como lo hacíamos los vampiros, aquello fue muy parecido al rugido de un oso enfurecido.

—¿Rajky? —Le llamé completamente aterrado, arrojándome al suelo junto a él, tratando de controlarle, pero el chico siguió rugiendo y retorciéndose sobre el terreno boscoso, alzando sus manos hacia mí como si intentara pedir ayuda. No supe qué hacer, cada minuto que pasaba se ponía peor, sus pupilas se encontraban amarillentas y su agraciado rostro comenzó a llenarse de pelos. —Rajky, cálmate... vamos... contrólate, no dejes que suceda si no lo deseas... que la bestia no te controle, por favor. —Quise maldecir, gritar y matar a todos esos malditos Quileutes, quienes eran los únicos culpables de toda aquella maldición con la que mi podre teniente tenía que lidiar.

—Apártate. —Escuché decir a mis espaldas, volteando el rostro para ver al padre de Idalí.

—Todo esto es culpa de ustedes, malditas bestias. —Espeté completamente enfurecido, percatándome de la presencia de dos lobos más que se acercaban. Les rugí, consiguiendo que ellos también lo hicieran, siendo el tal Sam el que se interpusiera entre los lobos y yo.

—Queremos ayudarle... pero necesito que te calmes y me dejes trabajar. —Volteé a ver a Rajky, el cual siguió transformándose de forma progresiva, contemplando cómo sus brazos habían mutado y su ropa comenzó a desgarrarse.

Me aparté a un lado contemplando como el padre de la imprima de mi teniente, se acercó a EdwJake, en compañía del par de lobos, quienes comenzaron a rugirle al muchacho como si intentaran hablarle en aquel idioma de bestias.

—EdwJake, si luchas mas será peor, ¿no quieres transformarte? —preguntó el líder de los indios, observando como Rajky negó con la cabeza, percatándome de como sus ojos se encontraban llenos de lágrimas. —Entonces contenlo, el secreto está en el dominio de la mente por sobre las emociones de tu cuerpo, debes controlarte y dejar de pelear con tu lado lobezno... relaja el cuerpo y oblígalo por medio de tu mente y demuéstrale que eres tu quien decide y quien manda, pero debes de calmarte y no pelear más.

Contemplé como los lobos le decían cosas en su idioma, consiguiendo que el chico se calmara, y la mutación retrocediera lentamente. Suspiré como si necesitara el aire en mis pulmones, observando como el chico poco a poco fue controlando las convulsiones de su cuerpo, hasta que volvió a ser el mismo vampiro de siempre, perdiendo por completo el conocimiento. Me arrojé nuevamente al suelo, tomando sus signos vitales.

—Debes llevarlo a que su padre o su abuelo lo revisen. —Asentí, tomando a EdwJake entre mis brazos, llevándomelo hasta la casa de los Cullen, escuchando como Sam me preguntaba. —¿Jacob no a vuelto aun? —Volteé el rostro para verle, respondiéndole completamente serio.

—Hay un problema con el señor Black, al parecer alguien lo ha secuestrado junto con la señora Alice... todos sospechan de los Vulturis. —Sam me miró completamente asombrado, asintiéndole a modo de agradecimiento, retirándome al fin con Rajky entre mis brazos de vuelta a la casa.

Francia

A ojos de Jasper

Pude percibir todo tipo de sentimientos en aquel lugar, odio, ambición, lujuria, un sinfín de sensaciones que me perturbaron considerablemente, al punto de no lograr coordinar mis propias emociones.

—Y bien... ¿A quién es que hay que romperle el culo para que hablen? —Edward volteó a ver a Emmett de mala gana, alegando que no se le rompería nada a nadie, por ahora, percatándome de cómo mi hermano, al parecer, estaba percibiendo los pensamientos de alguien que lo hizo abrirse paso entre la clientela de aquel lugar.

Lunasticio de dos LunasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora