Aún atontada por su viaje, Emma tuvo que concentrarse por un breve instante antes de recobrar completamente el sentido. Su cabeza le daba vueltas tan fuerte que la desagradable visión del castillo bailando antes sus ojos le provocaba nauseas. Una imagen familiar nació ante sus ojos que daban vueltas: esas paredes negras, esas cortinas, esa alfombra...Esa cama...Cuando se dio cuenta del sitio al que había llegado, se levantó enérgicamente, provocando un lacerante pinchazo en su cráneo. Antes mismo de haber podido decir una palabra, el dolor le hizo cerrar los ojos y se tambaleó. Si Regina no se hubiera acercado rápidamente, si no la hubiera estrechado contra ella, seguramente se habría encontrado de nuevo en el suelo.
Entonces el tiempo pareció detenerse. La dulzura de los brazos de la morena estrechando sus hombros le hizo olvidar por completo el mundo. Sus vértigos desaparecieron y un aturdimiento mucho más agradable los sustituyó velozmente. Con la cabeza hundida en el cuello de la reina, su perfume cosquilleaba en su nariz, y su corazón comenzó a acelerarse.
Regina, con los ojos cerrados, aspiraba el delicado perfume de los rizos dorados. Se hubiera podido quedar horas así, estrechando a la princesa contra ella y volviendo a la vida en sus brazos. Tras una eternidad, ella se inclinó y depositó un casto beso en su frente. La princesa, como despertada por ese beso, pareció finalmente volver a la realidad y se soltó de esos acogedores brazos. Cuando sus miradas se cruzaron, ninguna palabra podría describir lo que leían en los ojos de la otra.
Finalmente cara a cara, las dos mujeres se redescubrían. Tras días de conversación durante los que habían aprendido a conocerse, se veían ahora con ojos diferentes. Emma tenía ahora delante de ella a una reina rota, cuya crueldad no había sido sino el resultado de una vida marcada por la infelicidad. Habría querido tomarla de nuevo entre sus brazos. Pero una extraña fuerza se lo impedía. ¿Era el miedo? ¿El pudor? Bien es verdad que volver a ver a Regina en ese momento, tras tantas confesiones compartidas y secretos intercambiados, la impresionaba hasta tal punto que se quedó petrificada, con los ojos perdidos en los de la reina.
Cuando Regina había decidido regalarle aquel libro mágico a Emma, era consciente de estar ofreciéndole una posibilidad de volver a verse. Pero el hecho de que hubiera ocurrido tan perfectamente y hubiera funcionado tan rápidamente hizo que su corazón se acelerara. Si había funcionado tan bien, era, y lo sospechaba, porque Emma también lo había deseado tanto como ella. Y ese sencillo pensamiento hizo nacer una sincera sonrisa en su rostro. Los océanos esmeralda que la contemplaban temblaban, dubitativos. Sin esperar más, Regina se acercó de nuevo a Emma y acarició tiernamente su confuso rostro. Sin dejarle tiempo para reaccionar, la besó por toda la cara afectuosamente. Sonriendo de felicidad, multiplicó los besos, que se hacían cada vez más conquistadores.
«¡Cómo...te...he echado...de menos!» logró pronunciar
Emma había cerrado los ojos ante esas caricias. Hubiera querido tanto perderse y olvidarse en esos besos...Pero tenía tantas cosas que decirle...Así que, se apartó a regañadientes del abrazo. Regina no escondió su frustración, y volvió a atrapar a la princesa estrechándola contra ella, impidiéndole que huyera de nuevo.
«Estoy tan contenta de volver a verte, Emma» susurró en su oído «No me rehúyas...»
El cálido aliento hizo erizarse todo su vello. No podía retroceder, pero tenían que hablar.
«Espera, tenemos que hablar, Regina...»
«¿Hablar de qué?» respondió ella recomenzando con sus besos, que empezaban a migrar hacia su cuello.
La sensación era tan agradable que Emma inclinó la cabeza hacia atrás, incapaz de resistirse a los asaltos. Regina la besaba ahora con toda su boca, su lengua deleitándose con el sabor ligeramente dulce de la piel de Emma. Entre suspiros de éxtasis, logró de todas maneras responder.
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El canto del cisne
FanficTraducción del fic francés Le chant du Cygne, de Bonne Ame En el Bosque Encantado, la princesa Emma es secuestrada por la Evil Queen, más negra y sedienta de venganza que nunca...¿Va a ella a poder escapar de esos sombríos lugares de tortura?