El Sol También Brilla De Noche

Capítulo 20

Jaden

—¿Cómo murió? —le pregunto a Brittany.

Ella pone una triste sonrisa y sacude la cabeza, decidida a no decirme nada sobre eso.

—Adam era muy cariñoso y un muy buen novio —hace una pausa—. Lo último que supe de él fue que había discutido con Hazel. Cuando Hazel tuvo el accidente, me derrumbe, no sabía si estaba muerta y en tal caso era mi culpa, yo había visto como se subía a la estúpida moto cuando no estaba apta para conducirla —se interrumpe—. Pude haberla detenido.

Brittany contiene las lágrimas que amenazan por caer en su rostro y lo consigue.

—El resto ya lo sabes. Ella quedo en coma, y no pude quedarme más tiempo, mi padre ya me había ordenado regresar a casa. Tuve que irme pero regrese, no la pude encontrar, Lily e Ethan se la llevaron y simplemente desaparecieron. Nunca creí que se encontraba tan cerca de mí.

—¿Qué tiene que ver Stacy en todo esto? —pregunto confundido.

—Bueno, Stacy era la hermana de Adam y le guarda un gran rencor a Hazel —Brittany suspira y me mira a los ojos—. No te puedo contar más, no me corresponde esa parte de la historia.

—Es suficiente —le digo—. Gracias.

Brittany baja la cabeza un rato, cuando la levanta recupera la chispa de burla en sus ojos.

—Valla niño bonito ¿me estás dando las gracias? —sonríe burlonamente.

Sé que es su forma de decirme que quiere cerrar el tema.

—¿Yo? ¿A ti? —me burlo—, sigue soñando preciosa, agradecía el hecho de que hayas terminado de hablar, tienes una voz horrorosa.

Ella sonríe agradecida por el cambio de tema. Se queda un rato más en mi casa, le cuento sobre Ethan y me sorprendo gratamente al ver que Ethan no era digno del tiempo de Brittany, al parecer nos agrada igual de poquito. Le doy el número de teléfono de Hazel, la dirección de su casa, la de la universidad y la de su trabajo.

—¿Me estás diciendo que Hazel trabaja en el mismo bar en donde te conocí? —dice Brittany sin tratar de esconder su sorpresa.

—Sí, cantó la primera canción mientras estabas en el baño.

—Tiene que ser una broma y una muy pesada —dice Brittany—. Apartando un poco el tema, ¿Hazel es tu novia? —pregunta con una sonrisita.

—No, no lo es.

—Pero te gusta ¿verdad? —sigue preguntando.

—No es de tu incumbencia —le aviso pero se ríe.

—Cuida tu boca, ahora soy una pieza importante­ —me dice. ¿Pieza importante? ¿De qué habla?—. Soy la mejor amiga de la chica que te gusta. Ósea la personita que te puede ayudar con ella.

—¿Me quieres ayudar a conquistar a Hazel? —pregunto desconcertado—. Ni siquiera te caigo bien.

Ella se encoge de hombro y mantiene su postura.

—Prefiero que se quede contigo que con el idiota de su primo —me dice indiferente­—. A demás, tú y yo no somos tan diferentes.

Si, cada vez me convenzo más de eso.

—Ethan gusta de Hazel ¿verdad? —le pregunto algo convencido.

—Pues si te soy sincera, no lo sé —suspira—. Hay ocasiones en las que pienso que es solo una gran preocupación, pero a veces esa preocupación es demasiada, simplemente me da esa impresión.

Hablamos un poco más para luego salir de la habitación y despedirla. Cuando estoy a punto de abrir la puerta principal alguien lo hace desde afuera dejándome totalmente sorprendido.

No puedo controlar los latidos de mi corazón y tampoco mi expresión. Aunque ya estaba al tanto de que vendría no imagine que fuera tan pronto. Por un momento sentí felicidad pero soy un tonto, se supone que ya había superado estos sentimientos. Solo me hacen sufrir.

—Bienvenida... madre —digo un tanto agobiado.

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El sol se siente pequeño al pensar en la galaxia de hermosos colores que observa.

Pero más que envidia.

Lo que siente es... anhelo.