Hay momentos en los cuales no son mas que simples circunstancias y pierdes todas las ganas, esas ocasiones increíblemente aburridas pero que son tal para cual, esas ocasiones en la que ni vivir quieres más, y no miento ni les mentiré... Más de una vez he estado así como si mundo fuese de reversa y yo lo trato de detener porque al pasado no quisiera volver...
Con algunos picos de orgullo y unas cuantas neuronas sanas, unas células casi muertas y la vida acabada, así me podría sentir o me siento yo en un día como cualquier otro y a eso me refiero cuando este tema toco, pero piénsalo!
¿Quien no se ha sentido así, un día mas que otro? Las ganas son predilectas, los días inseleccionables, la lujuria moderna de querer sentir a gusto a diario, nos elimina el saber de que un día mas que otro amaneceremos que no querremos ni arreglar él armario pero no les blasfemaría acerca del tema, si supiera que esto fuese una pena eterna, aunque no es así, no es simple causa ni reacción, ni simple estrofa de repercusión son simples palabras que entenderás cuando ya te sientas sin corazon.
