¿Por qué no te conocí antes?

Enemigo falso.

Hola de nuevo, chica bonita. Te ves hermosa con tus vestidos y tus peinados alocados. ¿Te dije que te quiero? ¿No? Entonces, te quiero. Te gusta mucho leer ¿no?. Quiero relatarte algo, no es un libro, aunque creo que nuestra vida es uno, cosas interesantes pasan. Bien, mi relato va así:

Ella no era perfecta, sabes Bella Smith, ella no es perfecta. Pero es maravillosa, ¿se te hace conocida? Porque coincidentemente se llama igual que tú. 

Él, él tampoco era perfecto ni maravilloso, pero con ella se sentía bien. Era el motivo de su sonrisa.

Hoy la vi sonreír señorita y me encantó. 

 ¿Quién soy? Pues, aquel chico que te quiere. 

Nunca había escrito de esa manera, pero raramente lo hacía.

Arranqué la hoja y la doble, la puse en un sobre en forma de corazón y lo guardé. Había hecho 10 sobres y me quedaban ocho. En la última carta pondría mi nombre y ella por fin sabría quien era su admirador; bueno uno de los dos admiradores.

Todos salieron al receso. Bella se sentó con Miranda y charlaron. Mientras tanto fui a poner una carta en su casillero, sin que nadie me viera.

Esperé que ella fuera hasta su casillero y lo abriera. Cuando lo hizo cayó sólo una carta.

-¡Sí!- grité. Todos voltearon a verme incluida Bella- Sí... Aprobé matemática- dije avergonzado. Me había emocionado tanto que no me fijé que todos estaban ahí. ¿Conclusión? El otro admirador se había dado por vencido. Pero... ¿por qué?

Fui a ver a Gastón a preguntarle, sabía que era él.

-Hey, Gastón- le hablé un poco fuerte, entrando a su salón.

-¿Qué quieres Jackson?- me preguntó desanimado.

-¿Por qué le dejaste de escribir a Bella?

-¿De qué hablas?- quiso levantarse de la carpeta pero no lo dejé.

-Sabes perfectamente de lo que hablo. Sé que eras su admirador y ahora acabo de ver que no hay ninguna tarjeta.

-Ella no me querrá, Jackson. Cuando vi que habían dos cartas sabía que eras tú. Bella estaba mal ese día y la quería calmar, así que pensé en enviarle cartas, hasta que... Bueno lo que te conté desde el principio...

-Yo.. No sé que decirte..

-Sólo dime que la cuidarás- me dijo poniendo su mano en mi hombro.

-La cuidaré- Y salí del salón.

Gastón Cooper era un "enemigo falso", sólo quería cuidar a Bella y era bueno haciéndolo. Mientras tanto yo, la hacía llorar. No sé que me pasó en ese momento, sólo sentí un impulso en besarla, quizá quería besar a Bella, pero Reyna estaba a mi lado.

Fui al baño y me lavé la cara, tenía ganas de llorar. 

-Eres un completo idiota, Nick Jackson, ¿qué te pasa? Prometiste cambiar, ¿no?- le decía a mi reflejo- Prometiste cambiar...- susurré dándole unos pequeños golpes al espejo bajando la cabeza.

Salí del baño y fui al salón. La veía, sólo la veía a ella. Volteo a mirarme y yo, rápidamente, puse mi mirada en el profesor. Pero me di cuenta de algo, no me quería mirar a mi, sino a Miranda que estaba detrás mio, pues escuché que ella decía:

-A la hora de salida te doy el informe..

-Bueno..- le contestó Bella.

Estaba feliz, creo. Pero seguiré conquistando a Bella. Sé que me dirán: "Pero Nick, jugarás con ella de nuevo" "Eres un tonto, Bella tiene dignidad". Pero la quiero y me equivoqué. Nunca había sentido algo tan fuerte por alguien y era extraño tener "sentimientos".

Quiero dejar de ser ese chico que jugaba con las chicas. Es complicado, pues nunca tuve una relación estable, andaba con una y otra. Pero llegó Bella y no sé que me pasó. La quiero, la quiero bastante.

Prometo cuidarla Gastón, te lo prometo.