Conociendo

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El hombre suspiro pero no contesto a mi pregunta "ni que le hubiera preguntado algo personal".

Como no me respondió, me dirigí a la barra, sentí como él me seguía con la mirada, busque una bolsa. Me acerque con una negra de consorcio en mis manos. Me miro arqueando su ceja, le respondí con una sonrisa leve y le entregue la bolsa negra.

-¿Crees que limpiare lo que hiciste? ¿Yo?- pregunte burlonamente.

Con una mueca abrió la bolsa, se agacho y comenzó a levantar todo lo que podía entrar en la bolsa –Yo no hice todo esto- escuche murmurar para sí mismo.

Al escucharlo, sonreí a esto y me adentre. En el almacén, agarre la escoba y volví, el soldado se encontraba parado en medio de sillas y mesas rotas. En el piso había un gran charco de licor, por alguna razón me imagine un cachorro que destrozo todo y mira inocentemente sentado en el medio de todo el desastre. Me provoco una risa que hizo que el soldado se amargara más aun "que persona más malhumorada, pobre de su esposa". Me compadecí falsamente por su mujer o futura mujer o al pobre ser que lo soporte.

-¿De qué te estás riendo?- pregunto tirando bruscamente la bolsa.

Aquella acción debería haber callado a todos pero ahora si me estaba riendo de su berrinche, "por Satanás no se puede ser tan serio". Levante mis manos en señal de paz, riéndome suavemente por su actitud agresiva.

Apoye la escoba en la barra y volví al almacén por la goma para limpiar el licor del suelo. Cuando regrese el soldado barría, me pare en seco al verlo ya que esto no me lo esperaba, que engendro sin más agarrara la escoba y sin que nadie se lo dijera, empezara a barrer "¡¿Quién hace eso?! ¡Este soldado es un anormal!"-

Cuando salí de presenciar semejante aberración humana, llene el balde de agua, lavandina y perfume de piso, llevando este lleno de agua. Mi brazo ortopédico cedió para mi des fortunio, el balde cayo derramando todo el agua que para mi suerte llego hasta donde el piso tenia licor.

Levante el balde con mi brazo izquierdo, y después mi brazo ortopédico, al hacerlo vi al saldado que estaba paralizado en su lugar mirándome sorprendido, ante esto solo resople y se formo una sonrisa en mi cara porque a pesar de que se me haya roto el brazo robótico, de cierta forma la situación me dio gracia.

Me dirigí a una mesa cerca y después de unas sacudidas para quitarle el agua, lo puse en esta. El soldado seguía en modo estatua, camine hasta la goma y empecé a esparcir el agua. Pero un par de botas detuvieron la goma, levante mi vista al soldado y sonreí hasta su expresión.

Su expresión era de compasión, gracioso en mi opinión. La sociedad tienden hacer de menos a ciertas personas por no ser "normales", algunas de estas personas apartadas por el sistema sufren y no lo soportan, otras son usados y desechados, otros se lo aguantan y por ultimo esta la minoría de la minoría, las personas con pésima moral como es mi caso, la que nada innecesario hace y disfruta del espectáculo. Que en este caso era la cara del soldado.

-Déjame, yo lo hare.- ante esto yo sonreí.

-Oh ¿por quién me tomas?- pregunte con picardía mientras alejaba la goma de él. (Goma, me refiero a con lo que sacas el agua al limpiar el piso, se le dice goma a donde vivo).

El solamente me miro frunciendo su ceño.

-Solo amontona las sillas y mesas rotas en algún lado-

- Yo sacare el agua- dijo firme, parecía una orden, es un soldado malhumorado, y ahora es persistente y terco. Me falta que sea un pollito por dentro y tenía el cliché de las historias cancerígenas.

-Mira niño, si no hubieras armado una pelea en menos de unos segundos, estaría durmiendo ahora... así que si vas a perder el tiempo por esta tontería por qué no mejor te vas. Terminaría más rápido soldadito- el frunció el ceño y gruño. "Parece perro con hambre"

- Terminaría yo más rápido-

-Pues demuéstralo –

-Lo veras-

Y por un perro competitivo por primera vez en mi vida, estaba haciendo una carrera de quien limpia más rápido.


LAS COSAS RAMDON Y TODO LO DEMASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora