They just fell in love » Larry Stylinson - 1ra parte

Noche.

12.

—No soporto más éste dolor, joder, nunca quise meterme con él, nunca quise meterme contigo. ¿Qué debo hacer para que deje de fastidiar? Apenas hace cinco días que comencé el colegio y lleva dos golpeandome, es aterrador, en serio. —Dije entre sollozos y él me dirigió una débil mirada.

—Lo siento mucho, es todo mi culpa, Harry. Me culpo por todo, prometo arreglar todas las cosas y él no volverá a golpearte.

—Sufrí lo mismo en California, todos los días era un calvario regresar al colegio. Los acosos se volvían cada vez más frecuente pero supuse ser más fuerte junto a Adam. Él no está y estoy destruido. —Puse la última gota de mi aliento en mi testimonio. Louis me tomó la mano y me sobresalté, me tomó desprevenido. Demasiado diría yo.

—Estoy aquí y prometo cuidarte.

—No confío, tú no eres Adam, él ponía el pecho a las balas. ¿Qué hiciste cuando Jack me golpeó en el baño?

—Nada y lo lamento.

—¿Por qué me ignoras en el colegio, entonces?

—Reputación.

—Pienso que eres un idiota.

Di la vuelta dejando que Louis tragara sus propias palabras, ¿por qué algunas personas eran tan orgullosas que dejaban sus modales de lado? Recuerdo que Adam era así pero no un ''bravucón''.

Las imágenes del primer beso con mi novio azotaron mi mente otra vez después de tanto tiempo.

No quería recordarlo, no ahora.

Louis POV.

—Harry decidió no bajar a comer porque estaba muy cansado.

No realmente, él no quería que vieran su condición. Tenía un par de cortes en el rostro y se veía debastado, me sentía mal por él. Yo era el culpable.

La cena se dio tranquila y en silencio, por suerte, era lo único que esperaba.
—Da las buenas noches a Harry por mí si es que despierta, Louis.

Pidió Anne.

—También las mías, ¿podrias darle un beso de mi parte, Lou?

Preguntó Phoebe mientras se colgaba de mi cuello.

—Claro, cariño. Buenas noches a todas.

Subí las escaleras con la menor pizca de ánimo posible.

Harry se encontraba en su cama como lo había dejado hace un rato mientras veía su celular que fue dejado de lado cuando me vio entrar.

—¿Puedo dormir contigo? —Pregunté.

—¿Qué? —Preguntó Harry atónito.

—Si puedo dormir contigo, ya sabes, compartir cama. —Dije en tono gracioso que claro, no funciono.

—No Louis, ya ve a dormir.

—Vamos Harry, prometo no molestar.

—No me siento bien, ya ve a tu cama.

—Yo tampoco y tú eres mi mejor compañia, déjame dormir contigo.

Él se corrió dándome paso a un costado de su cama, me despojé de mi ropa y me coloqué los pantalones del pijama. Cómodo.

Ninguno emitía sonido hasta que decidí romper el silencio.

—¿Harry?

Lo llamé y él se dio la vuelta quedando frente a mí.

—¿Qué quieres?

—Que tengas buenas noches, espero que duermas bien.

Un simple roce de labios bastó para poder dormir plácidamente toda la noche.