Fiesta de té

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27.

Una fiesta de té se estaba llevando acabo en el hogar de la familia, Phoebe había invitado a sus amigas y Louis y Harry eran los anfitriones junto a ella. Para no ver caras largas, aceptaron la invitación enseguida.

El jardín se veía perfectamente organizado, las tazas y las niñas estaban en sus lugares. Sería una velada especial para la pequeña.

Como la pareja no entraba en las pequeñas sillas que habían acomodado para las invitadas, ellos tomaron asiento perfectamente en el bello pasto color verde. Louis mantenía sus piernas abiertas mientras Harry estaba dentro de ellas.

—Yo me he acostumbrado pero a las niñas les causará asco, hermanos.

Dijo Phoebe negando con la cabeza.

—¿Quieres decir que no puede haber besos?

Preguntó el de rulos inocentemente sabiendo la respuesta que vendría de aquélla pequeña de apenas seis años.

—No besos y no caricias. Sólo tomarán té. 

Unos minutos después del instructivo que les había dado Phoebe, ellas ya se encontraban correteando por ahí.

—Tu pelo se parece al mío.

Una pequeña con rulos aterrizó a su lado, Harry le dedicó una bella sonrisa y luego le dirigió la mirada a su novio.

—¡Louis!

Gritó una niña mientras caía en los brazos del castaño y el ojiverde se apartó para no hacerle daño.

De a poco todas vinieron cayendo a su lado y la hermana del de orbes azules las veía a todas con celos por estar cerca de sus hermanos.

El chico que poseía ojos verdes tal y cual a un frondoso bosque, caminó hasta ella y la cogió entre sus brazos.

—¿Y bien? Es tu fiesta, Pheeb. ¿Por qué no estás allá?

Louis ya había ido en busca de su guitarra y estaba acomodandose sobre el tronco del árbol.

—Ahora es tu fiesta y la de Louis —las lágrimas cayeron sobre su mejilla y el corazón se le estremeció—. Ve.

—Iré pero contigo, sabes que tú eres nuestra pequeña.

Besó su frente y una sonrisa ocupó el rostro de la niña.

Louis cantaba junto a las demás una canción muy extraña pero sin problemas los otros dos se les unieron.

—Imagínate cuando seamos padres.

Un día algo cansador, se encontraban estudiando en la habitación porque los exámenes finales se acercaban y eso no era bueno.

Louis le había puesto toda su dedicación a las asignaturas, y más a Arte que era la materia que se llevaba todo su odio.

Pero, ¿quién no le pondría todo su esfuerzo sabiendo que su orientador/tutor era Harry Styles?

—¿Crees que podramos serlo?

—Cuando acabemos con los estudios y yo sea un ingeniero en electrónica y tú un lindo y sexy maestro de primaria.

Dejó sus cuadernos de lado y llamó al de rulos para que tomara asiento sobre su regazo, éste de inmediato accedió.

—Creo que es muy pronto para programar nuestras vidas. Deberíamos vivir el momento.

—Te dejaré la razón, no quiero pensar en las madres que te darán charla cuando vayan a buscar a sus hijos.

Harry rió sobre los labios de su novio mientras sostenía su rostro con las dos manos como si se fuera a deshacer.

They just fell in love » Larry Stylinson - 1ra parteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora