They just fell in love » Larry Stylinson - 1ra parte

Qué.

23.

Caminé fuera de la escuela buscando a Louis con la mirada. Solíamos encontrarnos al pie de los escalones pero esta vez no estaba allí. Mi móvil se removió dentro de los bolsillos buscando llamar mi atención.

Lo quité de ahi sin perder la vista de los estudiantes que salían, busqué su camioneta con la mirada pero nada había allí.

"Surgió una de última con Phoebe y mamá me pidió que fuera por ella. Nos vemos más tarde en casa, príncipe. -L.T."

Bufé triste.

-Hola Harry.

Hayley y Candy saludaron felices a coro a lo que yo asentí con una sonrisa.

-Nos vemos luego, mi novio espera.

Avisó Hay viendo a su novio "universitario", o al menos así lo había tildado. Ese idiota no era más que un alarde.

-Te invito un almuerzo, ¿qué dices?

Era una buena propuesta, pero no del todo. Volví a revisar mi celular viendo el mensaje de mi novio brillar.

-Bueno.

Confirmé. Caminamos hasta Fratellis, a unas cuadras del instituto.

Ella optó por un Kedgeree, demasiado complejo para mi gusto y yo me conformé con un simple plato de pescado y papas.

-Y bien, ¿desde cuando se conocen tú y Louis?

Una sonrisa se formó en su rostro, contagiandome.

-Desde los tres años.

-Más de la mitad de sus vidas.

-Así es.

-Se ve que son muy buenos amigos.

Acoté mientras hacia espacio sobre la mesa para que nos entregaran la comida.

Una charla basada en Louis, básicamente, había transcurrido durante el almuerzo.

-¿Y qué hay de tú y Liam?

Pregunté curioso. Sabía perfectamente que sucedía entre estos dos, no había hora o día que Liam no la nombrara. Sus mejillas se tornaron rojas y una sonrisa tímida amaneció en su rostro.

Nota mental, preguntarle si no le duelen las mejillas de tanto sonreír.

-Se podría decir que mantenemos una relación no compleja.

-¿Y a qué te refieres con eso?

-Tu y Louis antes de ser novios, por ejemplo.

Esta vez fueron mis mejillas las que se asimilaron a un tomate.

-Estoy muy feliz por ustedes.

-Y yo por ti y Louis, hace mucho que no veía a Lou tan feliz como lo es ahora -hizo una pequeña pausa para poder beber un poco de su exprimido de naranja-. Liam me ha comentado de esos besos, ojalá no se repitan nunca más, ¿si?

Dijo risueña pero yo tan solo me mantenía pálido, no era algo de lo que quería hablar por el momento y nunca.

-¿Nunca te has sentido atraída hacia Louis?

Pregunté como si de verdad o reto se tratara.

-Ya sabes, cuando eres pequeño y todos los niños han dado su primer beso es bueno pero no si tu no lo has hecho. Tenía nueve y todas mis amigas presumían su primer beso, bastante tonto, entonces era mi cumpleaños y le pedí a Louis que me regalara un beso, él me dio uno pero al instante los dos comenzamos a reír frenéticamente. Fue cuando descubrimos que no podíamos ser más que hermanos.