Mi Destino

Capítulo 26

Luego de la celebración Sebastián insistió en quedarnos en su casa, los niños se quedaron dormidos en la camioneta, el cual tuvimos que levantarlos ya que no podíamos con todos, menos a Diana que Sebastián la llevó en sus brazos hasta la habitación.

En la habitación me despojo de mi vestido y me coloco mi pijama de seda que había dejado allí en el armario de Sebastián.

Al entrar yo me encontraba metida en la cama.

-Ya los niños están dormidos - me dice cerrando la puerta con seguro.

-Que bien, vamos a dormir estoy cansada.

Palmeo la cama indicándole que se acueste a mi lado. Él se quita su ropa y la deja en el sillón, va a su armario y saca un pañuelo.

-Todavía no vamos a dormir nena - sonríe picaramente. Se acerca y me susurra. - Te voy a tomar pero a ciegas... Para cuando estés lejos, solo debes cerrar los ojos y recordar este momento.

Venda mis ojos con el pañuelo y lo único que siento es su perfume. Se escucha que abre una de las gavetas de la mesa de noche y comienza a pasar algo suave por mis brazos, mis senos, mi vientre y luego mis piernas a pesar que llevo mi pijama igualmente mi piel se eriza.

Deja a un lado con lo que me estaba acariciando y me huele a chocolate siento algo espeso caer en mi cuello. Pasa su lengua limpiando lo antes derramado. Muerde y succiona, se siente tan bien. Llega a mi boca y me besa despacio susurrando.

-Uhnm el chocolate sabe mejor en tu cuerpo, me besa nuevamente pero esta vez más apacionado perdiendome en aquel beso.

-Ahh Ahh... Gimo en su boca.

Disfruto de su lengua saboreando todo el chocolate que ha dejado en mi boca, quita mi pijama y deja caer más chocolate pero esta vez es en mis senos. Con tan solo sentir su respiración cerca mi corazón palpita a mil, juega con mis pesones, lamiendo, mordiendo y succionando. Trato de jalar su cuerpo hacia a mi con mi piernas pero no lo permite.

-Cariño no seas impaciente.

-Te quiero dentro de mi.

-Debes controlarte... Disfruta.

Me toma desprevenida y me voltea quedando de espaldas hacia él. Pasa nuevamente la cosa suave por mi espalda haciendo garabatos para luego darme mordisco y besos.

-zazz me da una nalgada que me hace brincar. Retira mi panty y vuelve a voltearme unta chocolate en mi entrepierna haciendo lo mismo que hizo con mis senos pero en mi clictoris. Es tan delicioso que mi cuerpo se arquea, mi vientre se tensa y el se detiene...

-Continúa amor - le suplico.

-Calma cielo... Calma.

Mis cuerpo no aguanta más necesita liberarse, vuelve con su tortura. Introduce un dedo en mi vagina dando movimientos circulares hasta encontrar mi punto G, él de da cuenta por que mi cuerpo me delata estremeciendose con si toque, introduce otro dedo y continua su labor.

-Ahh Ahh Ahh Sebastián.

Fue lo último que dije cuando mi orgasmo se apoderó de mi cuerpo. Apenas me repongo se mi clímax él reparte besos por mi cuerpo para luego penetrarme. Su miembro duro y erguido hace que gime con placer, haciendo que él entre y salga con fuerza que estremece mi cuerpo.

-Ah nena que rico se siente, estas tan caliente.

Tres envestidas más y otro orgasmo se apodera de mi cuerpo nuevamente. Sebastián voltea mi cuerpo y me pone en cuatro sintiendo su miembro entrar más en mi dándole a él la liberación que necesita llenando me se él.

Cae exhausto a mi lado, me quita la venda mira mi rostro satisfecho sonríe y me besa.

-Te amo Mariana.

-Y yo a ti Sebastián.