Cerré las persianas continuas al gran ventanal, dejándome a oscuras, con sólo rayitos de sol colándose entre estas.— perfecto — exclame, contemplando el ambiente a mi alrededor. Perfecto para hacer locuras y llenarnos de inspiración.
Me lo imagino caminando en boxers por los pasillos del edificio, con una sonrisa burlona y un rubor en las mejillas. Sin importar el opinión de sus empleados al verlo en ese estado.
Empece a desnudarme, hasta quedarme con mis medias largas y mis tacos. Siempre a tenido fetiches con que conserve estas dos prendas y no es la primera vez que me lo pide.
— te estoy esperando mi amor — dije para mi misma, mientras me acomodaba en la silla de su escritorio.
Cruce mis piernas al sentir una leve brisa en mi zona íntima... ¿Debería empezar sin el?
(...)
La ereccion fue la parte fácil de mi misión, basto con imaginarme a Sally con una tanga negra mientras apretujaba sus pechos "pupi está necesitada"....La parte difícil era tener que ir hasta mi oficina solo con mis boxers. Mi secretaria principal, que yacía en la puerta de mi oficina. Era una eriza, que fue arrancada del cielo.. Me ayudo con varios problemas que tuve en el pasado y me aconsejo en distintos dilemas que me atormentaban cuando recién empezaba como escritor. Es una buena amiga de mi madre y me conoce desde que soy un adolescente... Ya conoce las locuras que puedo llegar a hacer.
Y es un bomboncito para su edad. Más de una vez , en mi pubertad, me he masturbado pensando en sus pechos y como estos aprisionan mi pene... Después no vi más la necesidad de
auto-satisfacerme.... Pero sus pechos siguen siendo espectaculares.
Salí del baño donde estaba escondido, que se encontraba justo al lado de la sala de entrenamiento. Osea que si los practicantes salen de este... Me verán con una erección en todo su esplendor.
Fui a paso apresurado, hacía una esquina de la planta, donde estaba situada mi oficina y antes el lugar laboral de mi secretaria.
La vi, detrás del gran escritorio, sus ojos clavados en la pantalla de su computadora y una media sonrisa adornando su rostro. Seguramente estaba viendo el éxito que su hija estaba logrando con la publicación de su libro, con el cual yo ayude y accedí a publicarlo gratis....un pequeño favor por tantos años de favores mayores.
Me agache frente al escritorio rápidamente y agazapado sin causar ruido. La madera con la cual este estaba construido me facilitaba pasar desapercibido... Imagínense si fuera de cristal.... Vería a un erizo semidesnudo, agachado frente a ella.
— Ya te vi cielo — no me voy a cuestionar como me vio y tampoco cuando — no puedes engañarme a mi — me levante lentamente y cubri con mis manos la zona pélvica. — ustedes los jóvenes son raros — soltó una risita y me miro directamente a los ojos.
— lo siento... Fue idea de Sally — me excuse para no quedar como un desesperado sexual.
— tranquilo cielo, no es la primera vez que te encuentro en una situación comprometedora — soltó otra risita, y dirigió una furtiva mirada a mis manos... Pensó que no me daría cuenta. — ¿que pasaría si otra persona te hubiera encontrado en esta situación? — recargo sus codos en el escritorio y junto sus manos.
— pues... Es debatible — dije chistoso, tratando de no hacer que se enojara.
— Si tienes razón... Adelante, cierra las persianas y dale lo que quiere a tu noviecita — note lo tóxico en sus palabras. Nunca le gusto mucho Sally.
— te dije que no me gusta que la llamaras así... Es mi novia y la chica con la que pienso formar una familia en un futuro cercano — recargue mis manos en el escritorio y la miré indignado.
