Ya cuando la noche cayó sobre la ciudad, dos erizos adultos se encontraban en un restaurante. Se hicieron un lugar después de sus horarios laborales exclusivamente para verse.
- que linda que estas. Pareces 10 años más joven - jugueteo el erizo escritor, sentado en una mesa para dos, a las afueras de un restaurante lujoso, del más alto prestigio, elegido especialmente por el.
- Gracias nene, vos también te ves bastante joven - dijo aproximandose hacia la mesa, para sentarse frente al famoso autor.
- ¿yo? Yo ya estoy viejo, ya no soy el salvaje irresponsable que era antes, vos, es otra historia - retruco esbozando una gran sonrisa.
- me hubiera gustado conocerte en esa época de salvaje... - un coqueteo tan directo que hacía sonrojar a cualquiera - aunque seguis siendo bastante loquillo a decir verdad - hablo ahora burlona, soltando una risita.
- No tenes idea nena -
(...)
- ¿Tuviste relaciones con el? -
Yo no estaba muy segura de que sea buena idea responder sus preguntas, pero el league of legends me estaba complicando bastante y Blaze me servía para no caer en la frustración.
- solo muchos roces y muchas indirectas, pero mi vagina sigue igual de cerrada y virgen como siempre -
Respondí, aprovechando los 50 segundos que tenía antes de volver a aparecer.- pero.... ¿Le viste la verga? - que curioso que pregunte por eso.
- ¿que te importa? - le respondi burlona - conseguite la tuya - voltee a mírarla unos momentos mientras me reía de su expresión irritada.
Tuve unos minutos de paz hasta que otra pregunta me cayó encima
- ¿Que sos para el? - era la primera vez en mi vida que una pregunta de Blaze me hacía sentir de esta forma... Arrepentida.No pensé nunca que soy para el y tampoco quiero hacerlo, no quiero caer en el hecho de que soy un pedazo de carne con el que pueda divertirse sin compromiso. Pero... Sus palabras, esas palabras que me dedico sobre esa estupidez de que llame su atención... ¿En que sentido lo hice?
Alguien como el, mayor y exitoso, no tendría ojos para una adolescente más que para pasarla bien un rato.... NO
No es correcto que saque conclusiones cuando apenas ayer todo sucedió... El tiempo, necesito tiempo, tiempo con el.- ¿Estas bien? - escuche la suave voz de Blaze a mis espaldas. No me di cuenta del viaje que hice a mi nube de pensamientos.
- Si tranquila, solo me tomaste por sorpresa. - continúe jugando tranquilamente, leyendo como los otros jugadores de mi equipo me soltaban insultos por haberme quedado quieta sin hacer nada (también culpa de pensar tanto)
- Perdona, responde cuando tengas la respuesta - fue el sello que le dio a la conversación, para salir de mi cuarto.
Era obvio que estaba disgustada, probablemente pensaba igual que yo o peor aún, creía que Shadow me manipulaba. De todas formas, tendré que explicarle... Cuando termine la partida.
(...)
- la fiesta se hizo algo larga y junto a Amy la pasamos bien, le explique varias cosas, como debe tratar a ciertas personas vitales para su futuro y que hacer contra la sofocante competencia que enfrentará. Cosas de escritores que te aseguran un lugar reconocido - explicaba el erizo oscuro, dando a relucir nuevamente sus dotes con las mujeres.
La mujer lo miraba fascinada, atenta a cada sofisticada palabra que el erizo emitía con pericia.
(...)
- Lo siento Sally, no puedo darte la contraseña - la veterana eriza observaba a la ardilla con desdén, desde detrás de su roblizo escritorio.
La escritora se ahogaba en su ira contenida - Soy tan dueña de todo esto, como lo es Shadow. ¿Porque el tiene acceso y yo no? - su tono entre irritado y indignado, solo lograba causar aún más desprecio por parte de la eriza.
- ¿Tal vez porque el no gasta cada Centavo que gana en en mismo día que se lo depositaron? - levanto una ceja - pero es normal, vos venis de una cuna de oro y diamante mientras que el tuvo que vender su auto para poder publicar su primer libro... No te culpo, solo es cuestión de valores - sus palabras se iban incrustando en el orgullo de la escritora, que no podía creer la supuesta forma en la que le faltaban el respeto.
- ¿¡como te atreves? — pensó en despedir a la secretaria, tirarla a la calle, pero su lazo con Shadow se lo impedía. — Osea que... — La interrumpieron ferozmente la única persona que no debía interrumpirla en ese momento.
- Sally - la eriza rosa, aprendiz principal del escritor, aparecío por el ascensor.
(...)
- vi que Amy es más expresiva de lo normal con vos - comento la eriza con una sonrisa risueña. Como si tuviera ganas de presumir a su hija.
- hay que tener un grado muy alto de inteligencia para te hable de forma agradable - Dijo dándole un sorbo a su copa de vino.- Creo que darle trabajo me hace bastante inteligente - dijo Irónico el oscuro sin creer sus palabras.
— No realmente, ella sabe como actuar con la gente que le es útil.. — respondió mirando los ojos del azabache, notando un curioso interés.
— Oh bueno, yo tampoco soy muy bueno con la gente si te soy sincero. Pero ella... Ella me ablanda casi instantáneamente. Tiene un parecido enorme con una persona que amo — confesó con una deleitadora sonrisa, sin correr los ojos de su compañera pero con la chica rosa y loca en la mente.
La mujer se tenso levemente, pensando que estaba coqueteando con un hombre con familia o inclusive, Casado — ¿tu hija? — cuestióno lentamente.
— No tengo hijos. — respondió rápidamente tal vez con intención de dejar el tema atrás — solo es una aprendiz a la que vi crecer y le tome el cariño que se le tiene a una hija —
Cristell se relajo. — claro, ¿es rosa como Any? —
— es la chicle más más pegajosa y loca del mundo — hablo con orgullo, cerrando los ojos un momento para disfrutar el vino.
Después de eso, el ambiente quedó en un agradable silencio, cruzaban miradas y se sonreían sin motivos.
Pero Cristell, tenía una idea.
La mujer lo miró sonrojada unos segundos. — Te comentó que no soy muy fanático de estos lugares — confesó mirando hacia un costado, revisando que el mesero que los había atendido no anduviera cerca... Prefirió arriesgarse, a ver si el tiro del final, le sale.El erizo oscuro la miro curioso y atento.
— ¿no queres venir a casa? Podemos pedir comida china o pizza y ver alguna película. — coloco la carta principal sobre la mesa sin una pizca de vergüenza.
Shadow no contestó en el momento, miró a un lado y luego devolvió la mirada a la eriza. Se levantó de su lugar sin decir nada, la tomó de la mano y empezó a corretear con ella de la mano, huyendo entre risas, de su caro pedido.
Llegaron a la esquina de la siguiente cuadra para detenerse y que los pies de la mujer descansarán.
— No se porque te invite a ese, lugar debí haberme arriesgado, como acabas de hacer vos — Musito Shadow, acorralando a Cristell contra la pared exterior de una farmacia cerrada.
La mujer elevo la cabeza para mirar a su crush adulto. Era todo tan simple, fácil y sexual entre ellos. No recordaba cuando fue la última vez un hombre le había llamado la atención de esa forma. — Esta bien, no esperaba que aceptaras — rodeo el cuello del erizo delicadamente y se acercó a sus labios con lentitud.
— Como podría no hacerlo, no hay nada más hermoso que una mujer te diga que quiere compartir la comodidad de su hogar con vos — rieron juntos y se sonrojaron juntos antes de besarse con pasión contenida.
Los brazos del escritor apretaron la cintura de su amante, presionandola contra su cuerpo, dando el claro mensaje de querer llegar lejos y reafirmo sus intenciones en cuanto cortaron con el beso. — mi departamento esta a unas cuadras de aquí y tengo un sillón perfecto —