CDM's conflict [Fanfic Corazón de Melón]

Capítulo 22

Tras un rato haciendo el vago mirando las flores ensimismada. Miraste la hora.

— ¿¡Qué?! — te preguntas a ti misma en voz alta, acto seguido te levantas y corres hacia el club — mierda ya es la hora y no tengo el guión aquí

Llegas en un par de segundos y coges el guión, Ken no está allí pero ahora mismo tienes otras cosas de las que preocuparte.

Al entrar en el club todos se giran hacia ti y aplauden.

— ¡Al fin! — alguien chifla y tú saludes mientras ríes

— Siento el retraso, se me fue el tiempo — juntas las manos en forma de disculpa

— Venga venga, no hay tiempo — te dice Iris desde el escenario — ¡Ven, te enseñaré los folletos que hay que repartir!

Eran folletos pequeños, rosados y con el título de la obra y los que participarían. También ponía que ese mismo día habría que pagar un precio mínimo para poder pagar los trajes y que el club de teatro no cayera.

— Le diré a todos los que pueda de la obra — dices

— Muchas gracias, nos será de mucha ayuda; ahora empecemos a representar — la pelirroja se baja del escenario de un salto y se sienta — ¡Venga, quiero ver pasión!

Comenzásteis a representar la obra, mientras lo hacíais Lysandro te hablaba como un caballero, en el momento estrella de la obra el chico debía tenderte su mano mientras formulaba unas palabras de amor y tú debías aceptar su mano, bailábais y termina con un profundo beso. ¡Vas a besar a el chico de tus sueños!

Cada vez se va acercando más esa parte, y más; tu corazón late rápidamente pero cuando miras a los ojos de Lysandro y ves la segura que tiene recobras la confianza y sigues con la obra. 

Tu corazón late acompasado con las palabras que pronuncias. Sus palabras a centímetros de tu rostro.

— Mi bellísima dama, en estos años nuestras diferencias nos han mantenido separados, yo no quería desperdiciar tu vida de princesa e intercambiarla por una de campesino como la mía; pero ya no voy a huir, ¡NO! Ahora... Estaremos juntos, ¿Me concedes este baile? — te tiende su mano y tú la aceptas

Pones tu mano sobre la suya y comenzais a bailar, te imaginas como sería una historia en aquella época, un amor prohibido pero demasiado grande como para detenerse.

— Lo estás haciendo genial — susurra a tu oido — si no te sientes preparada para lo que viene ahora, tan solo dímelo

— No te preocupes, solo es una obra, un beso no hace daño a nadie — le susurras

Lysandro te da una vuelta sobre ti misma y terminas inclinándote hacia atrás con el fuerte brazo de el chico para que no te caigas. Ahora el muchacho se acerca, demasiado, más, más cerca, te va dejando suávemente en el suelo y posa sus labios sobre los tuyos, cálidos, tiernos, dulces.