Accidente

2.6K 179 47
                                    

Las calles londinenses muggles estaban muy tranquilas, lo cual era muy poco común y mas siendo el centro de la ciudad, pero esa tranquilidad no duro mucho; de pronto el cielo se nubló, y de entre las nubes salieron tres humos negros que se dirigieron al puente Brockdale, haciendo que se colapsará y se llevara consigo a varios muggles, que en momento pasaban por el puente.

Alex leía la noticia sobre el colapso del puente del día anterior en la sala de un pequeño apartamento en en centro de Londres de espaldas a la ventana y mirando de frente a la puerta. Las vacaciones de verano comenzaron desde hace dos semanas y la chica llevaba una semana en ese lugar. Xóchitl estaba en el suelo junto a ella, acurrucada en un cojín y leyendo historietas.

—¿Ahora de que es tu historieta? —preguntó Alex, retirando la vista del periódico y mirando a su amiga.

—De los Vengadores enfrentándose a Ultron.

—¿El invento de Iron Man?

—Sí, es que se volvió contra ellos.

—No inventes

—De veras

—Como digas

Alex se fue hacia un pasillo a su izquierda, a la mitad del pasillo dio vuelta a la derecha de frente a un clóset, el cual ocupaban de librero. Regreso a la sala y traía bajo el brazo dos libros; Coraline y El Retrato de Dorian Grey.

—Oye —la llamo Xóchitl, levantando su mirada del cómic

—¿Mande?

—De esos libros ya sacaron películas

—¿En serio?

—Sí, ¿vamos en la tarde a verlas?

—OK, deberíamos de llevar a Severus también

—Pues yo no creo que él quiera ir. Por ser cosas de muggles...

—Xóchitl, Severus necesita salir de vez en cuando. Y es que desde que comenzaron las vacaciones...

—... Hace sólo dos semanas...

—... Ha estado muy ocupado. Además de que no va a querer que salgamos solas

—Pues que aguado

—Óyeme...

—Solo era una expresión

Alex se movió un poco en el sillón para acomodarse pero con un mal movimiento hizo que le doliera la espalda, se llevó la mano al centro de esta y se sobó un poco. Xóchitl al verla, tomó forma humana y de un mueble junto al sillón, a la derecha de Alex,  abrió el cajón y saco un botiquín de primeros auxilios.

—Se me había olvidado que tengo que revisarte

—Hasta a mí se me olvido

—Bueno Alex, vamos a que te revise en el cuarto

Las dos fueron por un pasillo a la izquierda y se metieron a la puerta del fondo. En cuanto se abría la puerta lo primero que se veía era una cama queen sizes con un edredón azul marino y con sus mesas de noche color blanco a cada lado y cada una con una lámpara de mesa igual blancas, a la izquierda en un rincón había una ventana grande con una cortinas blancas; justamente a la derecha estaba el armario y junto a este un tocador pequeño de madera con dos buros y tres espejos con su banquito. Al lado de este, a la izquierda de la cama, había una puerta que daba al baño. Al abrir la puerta se veía en seguida el lavamanos y el espejo grande, a la izquierda la ducha y la derecha el inodoro.

Alex se sentó en la cama de frente a la puerta del baño y dándola espalda a la puerta. Xóchitl se le acercó y junto a su amiga dejo el botiquín.

La Serpiente se enamoró de la LeonaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora