15.-Parte 2/3

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Viernes, 7 de abril de 2017.

Elsie.

Sigo acostada, mirando al techo con varios dolores que me consumen. El dolor en mi pierna no ha cesado, no para ni con analgésicos ni sedantes ni siquiera con morfina se fue el dolor.
Mi muñeca duele de a ratos, cuando intento levantar mi mano para hacer cualquier cosa que haría con normalidad.

Pero lo que más duele es mi alma. Estoy hecha pedazos. No puedo creer que no pueda tocar el piano en dos o tres meses. Es demasiado tiempo sin ejercer mi pasión, mi sueño.
Esta clínica me deprime, no puedo cambiar el canal del televisor porque el control está averiado y nadie se ha molestado en arreglarlo. Además, tengo que ir al baño con ayuda de alguien porque no he dominado las muletas, y con una muñeca rota todo se vuelve más complicado.

He estado tremendamente aburrida, solo ha venido Naia una vez. Y mi familia, claro. Pero nadie que me divierta.
Y siento un poco de culpa porque ahora Aidrian tiene también una pierna rota y un hombro lesionado. Al menos ninguno de los dos tuvo una herida demasiado grave. Y tuve digamos suerte de que el golpe fue de un sólo lado y no llegó a mayores.
El doctor Haider dice que si no hubiésemos tenido cascos tal vez ahora no contaríamos la historia.

Escucho la puerta y ruedo los ojos, seguro es mamá con algo de fresa para subir mis defensas. Odio la fresa y ella lo sabe. ¿Por qué demonios no puede traerme moras?

-Pasa.- Digo desganada.
Observo la puerta abrirse y reconozco la cabellera rubia de Dylen. Casi grito de felicidad.

-Els, Reina, ¿Cómo estás? ¿Qué fue lo que pasó? Anice intentó explicarme pero luego a puso a llorar y me dijo que te preguntara a ti.-
Mi amigo me abraza con delicadeza y se fija en mi brazo enyesado con una mueca.
Suspiro con pesadez y él toma asiento a mi lado en la cama.

-Lo resumiré, Rey. ¿Recuerdas que el martes llovió muchísimo hasta unos minutos antes de que el ensayo comenzara? Pues mi madre no quiso llevarme y Alexei no estaba en casa. Así que le dije a Aidrian que me llevara al núcleo.
》Él no estaba muy contento con la idea, pero logré persuadirlo hasta que aceptó.
Pues lo apresuré un montón porque no quería llegar tarde y uno de los autos del canal de al lado perdió el control y nos dio un golpe muy suave. La moto se tambaleó y rodó sin control alguno hasta que chocamos contra la defensa y caímos.
》Aidrian se fracturó el fémur y se lesionó el hombro. Yo me fracturé la muñeca, uno de los huesos del antebrazo, el tobillo y la patella, también tengo fisuras en el fémur. Tuvieron que implantarme una prótesis.
Pero estoy bien, no tuve ninguna herida que afectase mi cerebro o mi corazón. Un poco de hemorragia en la pierna, pero la controlaron rápido.-

La cara de mi amigo no se ve nada bien, parece que va a llorar, cosa que me hace querer llorar a mí. Toma mi mano sana y le da un apretón.

-Me alega que seas tan fuerte, Reina. Sabes que cuentas conmigo; me alegra muchísimo que sigas entre nosotros. Ya verás que con buena rehabilitación y el reposo adecuado ni te vas a acordar de ese accidente.-

Con una sonrisa triste le suelto la mano.

-No puedo tocar en dos o tres meses, tal vez más. Debo ver cómo reacciona mi brazo a la rehabilitación y dependiendo de cuánto mejore veremos si puedo continuar tocando el piano.-

Dylen me mira a los ojos. Sus lindos ojos verdes declaran tristeza.

-Ay Elsie, eso no me lo esperaba. Pero tranquila. Esa es una de las razones para esforzarte e intentar fuerte que todo se haga con la mayor efectividad posible.-

Le sonrío con toda la sinceridad que puedo.

-Espero que aún pueda ir al núcleo. Tal vez ya no pueda tocar, pero tal vez puedo cantar o ayudar a otras personas. No me quiero alejar de la música, Rey.-

-Ni de Azael.- Dice Dylen con una sonrisa divertida y haciendo ese incómodo baile con sus cejas de nuevo.

-Lo admitiré en voz alta una vez. No quiero alejarme de él. Me gusta mucho, no lo niego. Pero tengo miedo de que esa admiración que él siente por mí cuando toco se pierda si se entera de que no lo haré por un tiempo.-
Oigo un ruido, Dylen y yo nos giramos hacia la puerta que acaba de ser cerrada. Y el personaje que está ahora dentro de mi habitación es nadie más ni menos que el muy bien vestido Azael Braiden McDoughall.

No acostumbro a decir malas palabras, pero esto lo amerita. Mierda.

-Hey, Muñeca. Alexei me contó lo que pasó. Disculpa por entrar así, no sabía que Dyl estaba aquí. -

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