Stay With Me

Capítulo 36

Al llegar a casa fui directa a mi habitación. Dejé la mochila y me cambié, elegí lo que me pondría para la prueba de esta tarde. Puse sobre la cama unos shorts vaqueros, una camiseta de tirantes negra con una calavera, unas vans negras y una gorra negra de DC con las letras en blanco y morado. Me vestí, sin la gorra y bajé a comer.

En la mesa se encontraban Noah, Marie y Aaron.

-Siéntate cariño.-pidió Marie.

Me senté en la gran mesa junto a mi hermano pequeño.

-¿Cómo han ido las clases chicos?-preguntó Noah.

-¡Muy bien! Ahora tengo novia, se llama Zoe Wilson.

-Me alegro mucho cariño, que ganas de conocerla. ¿Y tú Skyler?

-Me ha ido bien.-preferí no nombrar el incidente de la cafetería.

-¿Qué tienes pensado hacer esta tarde?-me preguntó Marie.

-He pensado en apuntarme a hip-hop, tengo una audición para entrar esta tarde.

-Eso es genial Skyler. ¿Cuánto es el precio mensual?-quiso saber mi madre.

-Aun no lo sé pero no te preocupes, voy a buscar un trabajo para pagarlo.

-Oh no, eso no lo vas a hacer, nosotros lo pagaremos. Debes centrarte en tus estudios.

-No quiero abusar de vuestro dinero.

-No es abusar, somos tus padres.

La seguridad con las que Noah había pronunciado esas palabras me habían hecho sentir una calor en el pecho. Por una vez me sentía querida, protegida, en familia.

Un silencio ligeramente tenso se formó en la habitación hasta que fue roto por el pequeño.

-¿Puedo ir a verte bailar?

Miré a mis padres, preguntándoles con la mirada. Ellos asintieron.

-¿A qué hora es?-preguntó Noah.

-A las 5.

Miré el reloj enorme que había colgado en la pared. 3:45.

-Zarek viene a por mí a las cuatro y media.-avisé.

-¡Voy corriendo a vestirme!-gritó Aaron saliendo de la sala corriendo.- ¡Esperadme!

Reí ligeramente y me levanté para ir a ducharme

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A las cuatro y cuarto, ya duchada y vestida, fui a la habitación de mi hermano pequeño. Toqué tres veces y esperé a que abriera.

-¿Qué llevas puesto?-pregunté entre sorprendida y divertida.

-Voy vestido de bailarín de hip-hop.

Llevaba puesta una camiseta que le llegaba por debajo de las rodillas, los pantalones casi por los tobillos y una gorra colocada de lado.

Solté una gran carcajada por la vestimenta del pequeño.

-Ven anda.-le dije mientras reía.

Busqué en su armario una camiseta de su talla y otros pantalones. Encontré una camiseta verde con el dibujo de un skate y unos pantalones anchos de chándal gris oscuro. Se los pasé para que se los pusiera con unas zapatillas parecidas a las mías pero con las letras de Vans en verde fosforito. Le coloqué la gorra bien y él se miró al espejo. Puso las manos en forma de pistola mientras entrecerraba los ojos y enseñaba los dientes.

Saqué mi móvil y puse Snapchat. Nos hicimos una foto.

Poco después tocaron el timbre y Aaron bajó corriendo. Este niño tenía más ganas que yo de ir a la audición.

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Nos encontrábamos en una heladería después de la prueba.

-¿Cuándo te dicen si te han cogido?-preguntó mi novio.

-Me pasaré mañana después del instituto con Nat.

-¡Yo también quiero bailar como tú!

-Luego le preguntamos a mamá, ¿vale enano?

-¡Sí!

Se levantó corriendo con su helado en la mano.

-Voy a pagar anda.-se ofreció Zarek.

Pagamos y nos fuimos a casa. Estaba reventada.