Marie vio a Zarek y sonrió.
-Tú debes de ser el hermano de Ryder, los niños están en la sala de juegos. ¿Queréis quedaros a cenar?-dijo ella cortésmente.
Que diga que no, que diga que no...
-Gracias por la invitación señora Duch pero no queremos molestar, además deberíamos avisar a nuestros padres en todo caso.-contestó él.
¡Sí!
-Oh, sobre eso no te preocupes cariño, no molestáis y yo puedo llamar a tus padres para informarles de que os quedaréis a cenar aquí.-finalizó.
¡Nooooo!
-Está bien señora Duch, muchas gracias.
Ella salió de la cocina y él se giró a mirarme.
-Parece ser que pasaremos la tarde y noche juntos cariño.-se empezó a acercar a mí.
Miré a los lados y lo primero que vi fue una cuchara.
-¡Aparta idiota!-grité mientras le lanzaba la cuchara.
-¡Pero que no me tires cosas, pedazo de loca!-me devolvió la cuchara.
Lo miré mal y me senté en un taburete mientras me comía lo que acababa de preparar.
Él solo me observaba, era un poco incomodo tener a alguien mirándote mientras comes.
-¿Puedes dejar de mirarme? Me pones nerviosa.-hablé con la boca llena.
-No seas asquerosa, traga antes de hablar.-dijo divertido.- ¿te pongo nerviosa?
Le enseñé la comida masticada que tenía en la boca y él hizo una mueca de asco.
-Sí, me pone nerviosa que me mires mientras como.
-Das asco.-rió todavía con la mueca de asco.- Así no vas a conseguir conquistarme.
-Tampoco tenía intención de hacerlo, tranquilo.-le sonreí falsamente y me levanté.
Puse el plato en el fregadero y lo lavé. Zarek seguía detrás de mí, observando cada uno de mis movimientos. Cuando terminé, me giré y le salpiqué el agua de mis manos en la cara al chico, él cerró los ojos y sacudió el pelo como un perro.
Reí y lo vi sonreír. Poco después sacó la lengua haciendo una mueca extraña que me hizo volver a reír.
Subí a mi habitación con él detrás. Me tiré en la cama y encendí la televisión de 42". Palmeé la cama a mi lado para que el chico tatuado se acercara. Él obedeció y se sentó a mi lado.
-¿Qué quieres ver?-le pregunté amablemente.
-¡Película de miedo!-sonrió como un niño pequeño.
-¡No! Lo que sea menos una película de miedo.
Hizo un puchero mientras se acercaba más a mí.
No caigas Skyler, no caigas...
-Porfiiii, vamos a ver una peli de miedo.
-Está bien...-me rendí.
Él sonrió emocionado y me dio un sonoro beso en la mejilla que me hizo reír.
-Venga elige.-le dije limpiándome sus babas de la cara mientras reía.
Cogió el portátil de encima del escritorio y empezó a buscar la película. Cuando la encontró, lo conectó a la televisión. La película se empezó a reproducir. El chico se acomodó a mi lado mientras yo cogía uno de los cojines de la cama y lo abrazaba.
La primera escena de la película era una chica que miraba por la lupa del triángulo de la ouija y poco más tarde se colgaba de la lámpara del techo. Va a ser una película muy larga...
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Stay With Me
Genç KurguSkyler era una chica normal de 16 años, vivía en un orfanato en Manhattan desde muy corta edad, tenía todo allí y solo deseaba salir para poder irse pero todo cambiará en el momento que un matrimonio llegue desde muy lejos para adoptarla y alejarla...