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Maratón 4/5 💀

Daryl sale de casa más temprano de lo que acostumbra. Ha estado evitando verla y nisiquiera sabe por que. Glenn y Maggie lo han notado y no desaprovecharon la oportunidad de joderlo a cada rato.

Irse a vivir con Rick y los demas no es una opción, se veria raro y despertaria sospechas en el matrimonio confirmando que toda su joda es cierto y es algo que no quiere.

Camina hacia la casa de Aaron, donde esta la moto que le dio y el mismo reparo para salir a reclutar. Agradecia ese trabajo, no estaria en casa y no tendria que verla.

Por otro lado, Lucille no entiende el por que se escondia de ella. No es como si ella le fuera a pedir matrimonio o algo por el estilo, pensaba que habia quedado claro que fue un revolcon y listo. Aún asi no podia evitar sentirse nerviosa al verlo, al recordar que la tubo a su merced, que la toco a su antojo y ella no se negó. Definitivamente fue la mejor noche que tubo desde que llego a Alexandria.

Y aunque jamas acordaron que fue cosa de una noche, o de una vez, algo en su interior no queria que fuera asi. Queria volver a estar con Daryl, queria volver a sentir sus labios recorrer su cuerpo, volver a sentir sus manos tocarla de arriba a abajo, aunque no fueran nada en espesifico.

- Es para el viaje - le sonrie a Aaron - Supe que seran unos dias, asi que les prepare algo -

Le tiende dos tuppers con un sencillo y ligero estofado para los hombres que saldrian a reclutar.

- Eres un encanto Lucille, gracias - le agradece Aaron.

Ambos giran al escuchar la puerta del garage abrirse, dejando ver al cazador con su ballesta colgando, vestido con una chaqueta de cuero viendose más atractivo de lo normal.

- ¿Nos vamos? - le cuestiona al hombre casi ignorando la presencia de la castaña.

- Seguro. Ire a despedirme de Eric - anuncia el castaño antes de volver a entrar a su casa.

Lucille observa curiosa a Daryl, preparando su moto fingiendo que esta solo.

- ¿Tan mal estubo que ahora me ignoras? - cuestiona divertida.

- No te ignoro - murmura Daryl sin girar a verla, sigue concentrado en su moto.

- ¿No? - cuestiona incredula - He llegado a cuestionar mi existencia por tu culpa - bromea haciendolo reir un poco.

- No te ignoro Lucille - se pone de pie y por primera vez en dias gira a verla - Es solo que ¿como se supone que debemos actuar? -

- ¿Que te parece como dos amigos? - se encoje de hombros - Dos amigos que se vieron desnudos por accidente -

- Si yo viera a un amigo desnudo, actuaria peor que ahora - le responde Daryl

- Bueno pero tenemos que llevarnos bien, vivimos juntos después de todo - le recuerda Lucille.

- Bien, seremos dos amigos entonces -

- De acuerdo - le sonrie - Nos vemos amigo -

Se acerca a él, pegando a proposito su vientre en su entrepierna, dejando un beso en la comisura de sus labios. Daryl se estremece ante su tacto, un acercamiento que no es para nada de amigos.

Le sonrie por ultima vez a su amigo y gira para salir del garage de Aaron. Daryl la observa caminar para cruzar a su casa, moviendo exageradamente sus caderas.

Termina de subir a la moto, y la enciende para conducirla hasta el portón.

Esto va a trerle problemas y lo sabe. Se notan las intenciones de Lucille, y aunque no lo admita, él tiene las mismas. No recuerda la última vez que tuvo una noche tan buena, o una mujer asi a su merced, y la idea de que fuera cosa de una vez no le parecia en lo absoluto.

Necesitaba más, necesita más de Lucille

Lucille || Daryl Dixon.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora