Lucille || Daryl Dixon.©

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Ambas mujeres se quedan en silencio, admirando a los pocos caminantes que pasan al rededor, sin embargo estos las ignoran. La mirada de Sasha no se aparte del perfil de Rosita.

— Oh mierda — dice la morena con gran sorpresa — Mierda ¿otro bebé? ¿y de Daryl? — Rosita simplemente le limita a asentir, en silencio y sin diriguirle la mirada — ¿Ya lo sabe? —

— No — responde la latina — No es mi intención arruinar su "lo que sea" con Lucille — dice con reselo.

— ¿Ellos estan...— dice Sasha, anonadada — ¿Por que siempre soy la última en enterarse de todo?  —

— ¿Que debo hacer, Sasha?— dice Rosita — ¿Decirle que tendre un bebé de él y esperar a que decida si estara conmigo o con ella? —

— Podrían ser de esas familias modernas; la esposa, el hijo y la amante — dice Sasha, sacandole una disimulada sonrisa a la latina — ¿Que tiempo tienes? —

— Un mes, tal vez menos — dice un tanto insegura — y no se que puta mierda hacer —

Sasha, algo insegura, coloca su mano en su hombro, dandole un leve apretón en señal de apoyo, lo que la latina le responde con una ligera sonrisa.

— Vamos a hacer lo correcto, chica —

(***)

El aire frio choca contra sus mejilla, cierra los ojos al imaginarse estar de nuevo en Alexandria, con él. A intentado contactarlo pero es obvio que esta molesto con ella por lo que escucho en la radio. Ve a unas personas salir en bicicletas, sin embargo lo ignora pues es bueno usar la imaginación para transportarse hoy en día. Los caminantes gruñen en la barda, todos cubiertos por algo plateado en casi todo au cuerpo, cortesia de Eugene.

Justo, el nombrado sale tambien, suspirando pesado al verla ahí.

— ¿Que haces aquí afuera? Negan, podría...— comienza a hablar el cintifico, pero ella se adelanta.

— Yo se Eugene, se que va a molestarse — dice formando una linea con sus labios — Pero me importa una mierda —

Ambos permanecen en silencio, mirando a la nada frente a ellos. Eugene la mira de solayo, sin embargo ella permanece mirando al frente.

— Estas mal si piensas que estas seguro aquí — dice de repente — Cuando ya no seas útil, terminaras como ellos — señala a los caminantes con su mentón.

— ¿Como puedes garantizarlo? — cuestiona él.

— Por que él es así — dice sin más.

Eugene quiere decir algo, pero un sonido extraño lo interrumpe. Ambos se acercan a un costado de la reja, palideciento al verlas queriendo entrar. Lucille es la primera en acercarse, asustando a Sasha un momento.

— Mierda, estas bien — murmura la morena para luego abrazarla con fuerza.

— ¿Que hacen aquí? Si las atrapan...— sisea Lucille.

— Si no quieres que eso pase, dense prisa — dice Rosita del otro lado, vigilando el otro lado de la cerca.

Lucille sale primero, pasando por el enorme hoyo que las mujeres hicieron. Una ves del otro lado, le hacen una señal a Eugene de que es el siguiente, sin embargo este se niega.