Luke
Jadeé al sentir a Mathew penetrarme bien duro.
Apoyé mi frente en la cama y me aferré a ella, las embestidas eran cada vez más fuerte.
-¡Así precioso!-gimió y se vino dentro de mí con una embestida que me dejó muerto.
-Eres todo mio precioso-susurró en mi oído y dió otra embestida haciéndome gemir.
Salió de mi y me agarró en sus brazos, me agarré de su cuello y sentí como volvía a penetrarme mientras me jalaba hacia arriba dejándome caer metiéndola toda en mi interior, ya no sentía dolor.
-Eres tan hermoso-susurraba en mi oído cuando mientras me embestia-Nunca me voy a cansar de ti precioso-mordió mi labio inferior y se volvió a correr.
Salió de mi y me dejó en la cama con suavidad.
Miró el reloj y suspiró.
-Que descanses precioso, gracias-besó mis labios y salió dejándome allí agotado.
Cuando el salió, Dante entró y me agarró en brazos para llevarme a la bañera, se sentó en la bañera y me puso sobre su pecho para poder enjabonarme.
-Estoy agotado-susurré intentando a que mis ojos no se cierren.
-Descansa tranquilo yo te voy a cuidar-y cerré mis ojos con la voz de Dante en mi oído.
Me desperté en sus brazos.
Me moví apenas y un dolor recorrió toda mi parte baja haciendome largar un quejido.
-Hey quédate tranquilo no te andes moviendo-acarició mi mejilla-No puedes seguir así, dices que él te trata bien cuando están juntos, pero esto no es tratarte bien Luke, estás destrozado-me miró-Déjamelo a mi hoy.
-No, el no te trata bien a ti, no dejaré que te haga daño-negué con mi cabeza, acariciando levemente su mano con mi pulgar.
-No es una opción, es una orden-me sonrió-Descansa.
Me quedé un rato más acostado hasta que Mathew llegó.
-Precioso mañana vengo por ti, que descanses-me saludó entrando con Dante.
Me quedé afuera en otra habitación junto al guardia que hace años conocía y el único con algo de humanidad aquí.
-No eres Luke pero algo es algo-podia escuchar como Mathew agarraba a Dante cómo si fuera otra persona como lo era conmigo.
Me asusté al sentir un golpe pero no podía hacer nada, no podía meterme.
-Ahh...-Un quejido se escuchó de Dante.
-¡Vamos puta muévete!-gritó Mathew.
Miré al guardia quién me dio una leve mirada y siguió mirando hacia en frente.
Tapé mis oídos al escuchar a Dante quejarse, odiaba escuchar como los demás sufrían.
Pasé creo que horas así hasta que Mathew salió sin mirarme, entré y ví a Dante sobre la cama con moretones y rasguños.
-Lo siento tanto-acaricié su mejilla y besé su frente-No tenía que pasarte esto a ti, no otra vez-una lágrima cayó de mi mejilla.
-No llores-me sonrió y sacó mis lágrimas-Sabes que eres todo lo que tengo aquí, debemos cuidarnos mutuamente-acarició mi mejilla.
-Lo sé-acaricié suavemente su espalda.
-Hazme el amor-susurró mirándome.
-Estas herido, no voy a hacerte nada-acaricié su cabello.
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No hay salida (Gay/Yaoi)-Sin Editar
General FictionPor séptima vez en el día me dejaron en mi celda para si al fin poder descansar. Mi cabeza daba vueltas. Ya no sabía cuántos hombres habían estado conmigo en sólo este día, apenas me di cuenta que estaba en mi fría celda por el húmedo piso y el cara...