Epílogo

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Cuatro años después

Luke

-Despierta amor-unos besos fueron bajando por mi cuello.

-Mmnn...-Gruñí acomodandome en la cama.

-Bebé, hoy vienen nuestras familias. Vamos hay que arreglar todo-acarició mi mejilla.

Abrí los ojos encontrándome con aquel hombre que nunca más me había podido separar.

-Hola dormilón-besó mis labios.

-Hola amor-sonreí.

Él se levantó y miré detenidamente su cuerpo, ya no era el chico flacucho de hace cuatro años, ahora era un hermoso hombre fuerte y sexy.

-¿Que tanto miras?-Me miró sonriendo.

-A ti-sonreí.

-¿Te gusta lo que ves?-Me miró pícaro.

-Me encanta-mordí mi labio inferior.

Él se acercó a mí y me besó los labios para después tirarme la frazada dejándome desnudo.

-¡Hey!-Me quejé.

-Arriba-sonrió y salió de la habitación.

Reí y me levanté para vestirme, bajé donde Dante estaba preparando el desayuno.

Me acerqué por atrás y me abracé a su espalda, aún había marcas en ella pero así me encantaba.

Besé su espalda y me aferré a él.

-Te amo-susurré en su oído.

El se volteó y me miró sonriendo.

-Yo también te amo hermoso-acarició mi mejilla.

-Casi muero el día que te arrebataron de mi-susurré ahora en su pecho.

-Ahora estoy contigo mi amor-acarició mi cabello.

Sonreí y me escondí más en su pecho.

-Llegaron-sonrió-Vamos-tomo mi mano y caminamos hacia la puerta donde ambas familias llegaban.

Mi madre y su madre se abrazaron y como siempre hablando y hablando.

-¡Mira a nuestros bebes!-gritó mi madre como loca haciendo gritar a la madre de el.

-¡Por dios mujeres los van a asustar!-Rió el padre de Dante junto al mío.

-Dios-rió mi hermana-Hola chicos-me abrazó y luego abrazó a Dante.

-Cada día están más lindos-nos guiñó el ojo mi hermana.

Saludamos a nuestros padres y madres y cargamos a los pequeños hasta la cocina.

Dónde desayunamos todos juntos y después fuimos a tomar una siesta.

Subí con Dante y nos acostamos abrazados.

Me subí a su cuerpo y lo besé lentamente.

-Mmnn no mi amor vas a despertar otra cosa que no se puede despertar ahora-rió acariciando mi pecho.

-¿Mas tarde?-Reí pícaro.

-Claro que si-sonrió dándome un beso-Te amo-me miró a los ojos.

-Y yo a ti-lo abracé y lo besé.

Amaba a este hombre, nunca más pudimos separarnos.

Luego de que me encontraron en aquel lugar y volví con mi familia, tuve muchos problemas, gritaba en las noches pensando que Mathew estaba allí cuando en realidad era Dante intentando calmarme.

No salí por un buen tiempo hasta que volví a ver a mis amigos, mi familia, conocí a nuevas personas y Dante siempre a mi lado, fui mejorando y ahora soy lo que soy.

Dante y yo comenzamos a trabajar, él como empresario con nuestros padres y yo continué mis estudios de medicina, ahora era un doctor y me encantaba ayudar a caso especiales.

Dante y yo ayudamos a varias estaciones policiales a encontrar lugares como estos, muchos hombres malos fueron mandados a prisión incluído Mathew y sus dos hermanos que nunca saldrían.

Byron y Jessie ahora estaban casados y esperaban una pequeña niña.

Emiliano y Christian seguían siendo amigos y vivían con sus familias felices.

Ryder y yo aún manteniamos el contacto, él era un chico fuerte que continuaba con sus estudios.

Marcus y su hija eran felices en su nueva casa en el campo, el me había pedido perdón por todo lo ocurrido pero yo no le tenía rencor, era un amigo más

Luego descubrí que el chico de ojos verdes que veía en aquel lugar, había muerto años antes a manos de uno de los clientes. Yo creo que tal vez fue un fantasma o una alucinación mía que me ayudó a seguir adelante y por eso le daba las gracias al chico fallecido.

A Dante y a mi el destino nos había unido, recuerdo que yo me repetía no hay salida...pero si la había y esa salida era él, el amor de mi vida.

No hay salida (Gay/Yaoi)-Sin EditarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora