XXXI. Ágil destino

2.9K 362 208
                                    


Pov Alexia


Cerré los ojos a medida que escuchaba a los otros pelearse, sin aportar nada a la situación.

Porque ésta vez, era de las pocas ocasiones en la cual no me importaba nada de lo que estaban conversando. Me era indiferente algo tan banal.  

Pero mis compañeros estaban muy en contra del supuesto vil acto que había cometido Hakuryuu y, ahora mismo, estaban desvariando sobre eso. 

— ¡No tenías derecho!— Exclamó Alibaba, con enfado. Abrí los ojos y le vi apretando la mandíbula, justo antes de señalarme— ¡Seguro que Alexia también está en contra! 

Si no lo hubiera hecho él, me hubiera encargado yo misma.

El de Kou rotó su cuello hasta mirarme, con una seria expresión en su rostro. Básicamente, me miraba expectante de mi respuesta. 

Al igual que los demás. 

Bajé la mirada y observé a Aladdin, que también me examinaba.

— ¿Estáis seguros de que queréis oír mi respuesta?— Espeté, subiendo la mirada ahora hacia ellos. El rubio frunció el ceño— No creo que te guste.

— ¿¡En serio estás con él!?

Me encogí de hombros, más que despreocupada.

— Ya viste lo que hizo, Ali— Murmuré, con los ojos entrecerrados— Esa mujer ha manipulado y maltratado a niños secuestrados por sus propios padres. No me parece una gran pérdida para la humanidad. 

— ¡Pero él no tenía por qué hacerlo! 

— A veces es mejor coger la justicia por tu mano— Expresé, colocándome bien el cabello—. Esa mujer ha hecho mucho daño. 

— Pero...

Alcé el mentón, observándole con astucia. 

Si supieras que, el mismo día en que os conocí, maté a tres personas sólo por intentar robar a una chica... 

Qué ingenuo eres, Ali.

— ¿Sabes?— Sonreí, torciendo mi cuello. Comencé a caminar hacia adelante, alejándome un poco de ellos y de toda esa habladuría de sentirse mal por alguien que no era importante— A veces no todo el mundo merece vivir.

— Alexia-san, espera...— Habló débilmente Aladdin. Claramente, éste quería que me quedase para apaciguar tal tensión.

Subí mi mano, moviéndola. 

— Avisadme cuando acabéis de discutir por esta tontería~.

[- - - - - -]

...


Observando el cielo nublado, me encogí en el sitio. La verdad era que me entretenía contando las diferentes nubes que habían (por mucho que prefiriera otra clase de acción), con el eco de los niños de Madaura llorando, sin embargo. 

Si esa mujer tenía también un arma mágica, vete a saber cuántas personas más lo tendrán...Ya me he dado cuenta que no es nada difícil conseguirlas.

Primero el amigo de Ali, después esta mujer...

¿Planean que todo se vuelva un caos a manos de gente así? 

Me moví un poco en el suelo, sonriendo para mí misma. 

En todo caso...Les queda poco.

La misteriosa conquistadora de laberintos | Magi (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora