Kiwi-LS

Capítulo 16

This is for you edendestyles

¿Cuántas veces debemos pedir perdón para arreglar lo que no tiene arreglo?

Era tarde y la ultima media hora Harry y Louis se la habían vivido peleando.

— No quieres que follemos. Dime que quieres y te lo daré. — el mas pequeño de los dos estaba fiera de quicio.

— Louis. El sexo no se da en planeamientos. No puedes esperar a que se me levante con tantos gritos. Me estresas. — Harry quería ser bueno con él pero no podía. Ambos estaban molestos.

— Pero no te estresaba tu puta tabla. — Louis le gritó de vuelta.

— Eso fue hace mucho tiempo y hasta tu viste que la perra me dedicó un álbum entero. No me presiones. — no podía creer que aun le echara en cara su falsa relación con la cantante obsesiva.

— Bueno, pues ojalá y ella te la baje cuando por fin puedas despertar a tus malditos diez centímetros de felicidad. — le espeto Louis y dio media vuelta para salir de la habitación. Harry lo detuvo.

— Quieres que te haga una mamada, ¿verdad? — inquirió Harry molesto. Siempre era así con Louis cuando se enojaba.

— No, yo no quiero que lo hagas mejor voy y le digo a la del tukanazo que siempre si. — él solo quería hacer enojar a Harry, quería que él sintiera lo que el sentía cuando no hacían lo que prometían.

— Eres un maldito manipulador — espeto Harry, se acerco hacia donde el pequeño chico de apenas un metro cincuenta se encontraba (esto de su estatura en teoría, para todo el mundo era así, pero Louis siempre lo negaba).

No pensó mucho lo que hacía, simplemente lo hizo. Besó a Louis, quería callarlo. Este beso era mejor que el de la fiebre de la otra vez.
Desnudó la piel del hombro de Louis, la besó y sonrió. Amaba eso, amaba ver a Louis muy rojo.

— Te perdonaría pero sigo molesto — Logro articular Louis.

— Callate ya — besó su boca, hacia mucho que no lo hacia, él sabor era el mismo, todo él era el mismo cuando estaban juntos.

Todo el conjunto que Louis llevaba ya no estaba en él. Sabía lo que Harry haría. Su mano llego al punto exacto que Sabía para volver loco a Louis. Era un pene pequeño, demasiado grueso y muy sexy. Besó cada parte de la carne, lo masturbó, jugó con él. Lo volvió loco.

— Me gusta así. Aun no lo olvidas. Por favor, sólo metelo en tu boca Harry — Louis estaba enloqueciendo. Amaba cuando lo masturbaba.

Una de las desventajas mas obvias para él era la que Harry siempre tomaría como su arma especial. Dejó de jugar con Louis. Se incorporó y acomodo sus ropas.

— A la próxima trata de pasiva a tu hermana la del botox. — gritó al tiempo que salía huyendo de la habitación dejando a un Louis muy molesto.

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— Pero juro que te meto el vibrador sin dilatador cuando duermas. — estaba furioso con Harry — Sé que volverás, tendrás frío o tal vez hambre. Lanzó toda clase de artilugios que encontró a su paso en la habitación.

No se equivocó, ya muy entrada la moche Harry Volvió pero Louis ya había tomado toda la cama así que tuvo que dejar varias de las cosas que llevaba en las manos para despertarlo y hacer que se moviera a un lado.

— No, vete. Este es mi lado de la cama. — medio dormido Louis lo corría de su propia cama.

— Enano mamón, esa es mi cama. Maldito infiltrado quita tus asquerosas lonjas de mi hermoso colchón especial de pluma de ganso ancho. — Harry lanzo a Louis al suelo.

— Maldito tu, maldita jirafa con cara de orgasmo frustrado. — Louis se puso de pie y busco en la habitación algo que lanzarle, tomó una cámara que alcanzo y se dispuso a arrojarsela.

— ¡No! Deja eso. Es para el sextap de Niall, me pidió uno a cambio de su silencio. — corrio a arrebatarle la cámara.

— ¿Pensabas grabar cómo te follo? — casi gritó Louis con aquella declaración.

— Algo así, él iba a hablar de mis fotos de la sexshop. — encogió los hombros indiferente.

— Te odio. — le dijo Louis y luego lanzo a un lado a Harry para volver a echarse en la cama y dormir.

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Las nueve de la mañana del día siguiente y el teléfono de Harry lo paraba de sonar, era un trauma para Louis. Él amaba dormir las que dejar el culo de Harry más abierto.

— Harry, soy yo. Las fotos de pareja para la publicidad se adelantan a dentro de una hora, la sesión sera agotadora. — una voz femenina habló antes de que louis dijera que odiaba que lo despertaran.

— Harry, te llama tu novia la zorra. — grito en el oído del aludido que dormía plácidamente abrazado a una almohada asquerosamente babeada. — En un rato te coge el teléfono. — colgó al ver que Harry no despertaba.

— No. Ella no de nuevo. — dijo soñoliento Harry. — Debo trabajar Louis.

— Creí que hoy si follariamos pero esta bien. — espetó el otro chico y salio rumbo al cuarto de baño donde se encerró con azoton de la puerta.

Harry llamó a su hermana, debía contarle que Louis estaba ahí.

— Antes de que digas nada. Hoy no hablaré de la pimienta y especias de mis juegos sexuales. Hola Gemma. — Harry habló primero y saludó a su hermana.

— Hola Harry. Yo también te aprecio. Es la mejor noticia que me has dado, por fin dejaras a tu culo sanar emocionalmente. — ella siempre estaba disponible por las mañanas porque había decidió hacer ejercicio y ahora salia al gimnasio cada mañana.

— Louis esta aqui y le debo una follada. — susurró Harry al teléfono.

— Bueno por ti. Espero que lo disfrutes pero debo entrenar. — dijo su hermana y luego le colgó.

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Harry llegó tarde a su sesión, como Siempre, pero llegó aun mas tarde porque Louis insistió en ir con él y llevarse un gran mazo que Harry había conseguido quitarle en el coche pero que no sirvió de nada porque dentro de su mochila llevaba una gran navaja.

— No somos pareja Louis, ella sólo hará creer que nos relacionamos más. — habló con él antes de que entrara al ser y mientras lo maquillaba.

— Ok. — había dicho Louis para luego darse la vuelta e ir a tomar asiento en una de esas sillas de productor de cine  que había en el lugar.

Louis llamó a "su mejor amiga".

— ¿Cuándo conoceré al siguiente bebé modelo para las fotos en familia contigo? — pregunto antes que nada.

— Yo tampoco lo conozco Louis. — le respondió ella.

— El Último vomitó mi ropa y lloró como un loco. No me agradan los bebés vomitones.

No habló mucho con ella. Fue rápido y breve con lo que quería saber y luego colgó.
Harry había acabado más rápido de lo que había pensado, sólo habían pasado unas horas desde que habían llegado y desde su llamada telefónica. Lo llevó de vuelta a casa y se dedicó a preguntarle todo lo acontecido antes de su reencuentro.

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