Epílogo

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21 de Junio

En algún lugar

Ythan y yo vamos con un rumbo trazado, uno muy claro para Ythan, aunque yo sigo sin saber a dónde vamos; él no me lo ha dicho, yo tampoco he preguntado. Y aunque me lo dijese seguiría perdida. Mi familia, mi mundo entero se va quedando cada vez más atrás con cada kilómetro que avanzamos. Mi abuela recordó guardar mi diario y releyendo sus hojas los siento más cerca de mí.

El camino no ha sido fácil. La primera noche, cuando cayó sobre mí la comprensión de todo lo que había pasado, comencé a llorar y no pude parar. Ythan atendió todas mis heridas físicas, pero con cada cuidado que él me daba, y que no lo hacía mi mamá o mi abuela, una nueva herida aparecía en mi corazón; y esas aún están intactas; esas aún no las he podido sanar.

Nos mantuvimos en caminos alternos. Sin llamar la atención. He querido indagar un poco más en el pasado de Ythan, pero él insiste que su pasado forma parte de un secreto más grande que él; que no es exclusivo de su propiedad, y no puede revelármelo, no aún. Por lo que sé hasta los momentos es huérfano, y se educó en El Refugio; y he conjeturado que fue allí donde le enseñaron todo lo que sabe, y no solo de la energía sino también de supervivencia, que es lo que nos ha mantenido a salvo en nuestro camino.

Pareciera que mientras más nos acercamos al Refugio más se aleja él de mí. Quiero pensar que los secretos que tiene no serán tan grandes para separarnos. Sigue siendo cariñoso, amable, atento conmigo, incluso reanudamos los tutoriales (para mantenernos activos) pero una parte de él se abstrae cada vez que verifica la ruta, y esa parte no regresa.

Cuando llegamos al segundo lugar seguro que nos marcó mi abuelo ya había allí una carta de él esperándome, la escribió al parecer a los cuatro días de habernos ido. Casi la destrozo abriendo el sobre con desespero.

En ella me cuenta sobre esa genial idea de Sai sobre el accidente de mi mamá donde ella pierde la memoria de lo que ocurrió ese día y de cómo me fugué con mi novio (Ythan) porque al parecer tenía malos hábitos y no era aprobado por mi familia; incluso Sai, al parecer, intentó en varias oportunidades hacerme desistir del asunto. Tengo que recordar cuando vea a Sai de agradecerle su inventiva en esa última parte. Cuando lo vea, si lo vuelvo a ver.

Las últimas líneas de su carta son las que siempre me acompañan y me dan fuerza:

Las últimas líneas de su carta son las que siempre me acompañan y me dan fuerza:

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****FIN****

Nota de Autora

Este ha sido un excelente viaje para mi. Espero que hayan disfrutado esta novela tanto como yo disfruté escribirla y compartirla con ustedes.

Gracias por leerme, gracias por todos sus votos y comentarios.

Si, habrá segunda parte pronto, pero primero publicaré otras novelas que tengo listas y terminadas y que quisiera que también leyeran y apoyaran como hicieron con Gemas de Poder.

Un abrazo inmenso a todos

Gemas de Poder: Sobrevivir Con PoderesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora