Entre Tus Brazos

Capítulo 15

Desperté con una enorme sonrisa al notar que Adam aún seguía dormido, se veía tan tranquilo, me acerqué a él besando sus labios con suavidad, pero inesperadamente me colocó sobre su cuerpo, rozó su nariz contra mi mejilla sin abrir los ojos y trazó círculos en mi cintura.

-Buenos días- susurré.
-Estabas por irte, ¿cierto?
-Por supuesto que no.
-Aud, sabes que me encanta despertar encontrandome a una chica sexi desnuda en mi cama- puse los ojos en blanco.
-Pues vete acostumbrando porque no siempre será así, cariño- me solté de su agarre y comencé a vestirme- Iré a ver si Sav amaneció bien.
-Espero que no la hayamos despertado ayer en la noche.
-No lo creo, se sentía demasiado deprimida y apuesto a que se quedó totalmente dormida.
-Pues yo no lo creo.
-Ya verás que si- salí de la habitación y me dirigí hacia la habitación en la que se estaba quedando Savannha, sonreí y tomé el pomo de la puerta abriéndola.- ¿Ya estas... - mi sonrisa se borró al notar que Savannha no se encontraba aquí- ... despierta?- frunci el seño y fui a la cocina en donde estaba Adam preparando el desayuno.
-¿Sigue dormida?
-No.
-¿Y porque no esta contigo?
-No esta, creo que se fue.
-Tal vez... - en eso se abrió la puerta y extrañamente Savannha entró sonriendo.
-¿En donde demonios estabas?- pregunté cruzandome de brazos.
-Oh, ¿no te avisé?
-No- dije obvia.
-Es que olvidé mi celular en la casa de Stryker y tuve que ir por él, pero no quise interrumpirlos- Adam casi se atraganta con su cereal al mencionar eso Savannha.
-Pudiste habernos interrumpido.
-Si claro- se cruzó de brazos- Por favor Audrey, ¿que clase de estúpida sería al interrumpir a alguien que esta teniendo un buen sexo?
-¿Como sabes que fue un buen sexo?
-Oye- dijo Adam fingiendo estar ofendido.
-Sólo estoy dando mi punto- susurré hacia él.
-Lo sé porque se escuchaban hasta mi habitación tus gemidos de satisfacción.
-¡Hey!- mis mejillas comenzaron a arder.
-Es la verdad.
-Bueno, eso que importa, aún no me haz contestado donde demonios estabas.
-Me quedé con Stryker.
-Pudiste haberme llamado para que fuera por ti o a Adam.
-No, olvidalo, era demasiado tarde.
-¿Al menos él se comportó?
-No comprendo.
-Savie, ambas sabemos que le gustas para tener sexo.
-Descuida, ya no será necesario porque... - dejó de hablar y abrió los ojos como platos como si hubiera hablado de más.
-¿Que quieres decir con que ya no será necesario?- mordió su labio inferior, parecía nerviosa- ¿Savannha?
-Bien, ya tuvimos sexo, por eso decidí quedarme contigo porque cometí esa estupidez y si seguía quedándome con él volvería a hacerlo.
-Pero lo odias.
-Eso no es cierto.
-¿Como terminaron teniendo sexo?
-Estábamos ebrios, ni siquiera recuerdo con perfección los detalles.
-¿Que acaso eres estúpida? Savannha, acabas de terminar de una relación de mierda por la cual terminaste deprimiéndote y ahora sales con que te acuestas exactamente con el chico que decías odiar, el cual lo conocemos por tener sexo de una sola noche. ¿Que no piensas?- fruncio el seño.
-¿Sabes? No deberías estar diciéndome esto, ya que tu estas cometiendo la misma idiotez.- dijo molesta.
-¿Perdón?
-Abre los ojos Audrey, tú hiciste lo mismo que yo, también acabas de terminar una relación de mierda y ahora te acuestas con el que decía ser tu amigo y disculpame si digo esto Adam- dijo mirándolo- pero él también es mejor conocido por tener relaciones basadas sólo en sexo.
-Estas cambiando todo. ¡Esto no es justo!
-¡Vete a la mierda!- se dirigió a su habitación y azotó la puerta.
-Auch- susurró Adam.
-No quería que salieras implicado en esto.
-Odio admitirlo, pero Savie esta en lo cierto.
-¿Que?
-Tiene razón, no deberías estar juzgándola justo cuando tú estas cometiendo la misma idiotez- frunci el seño- Además, dejala, es su vida.
-¿Acaso estas de su lado?
-No, de hecho no estoy del lado de nadie, sólo de la razón- me guiñó un ojo, tomó su plato con cereal y entró a su habitación. Suspire con frustración, me dirigí a la sala acostándome sobre mi estómago en uno de los sillones, esto no iría nada bien si seguía así con Savannha.

***
Abrí los ojos al sentir la luz del sol dar en mi rostro ya que una de las ventanas de mi habitación estaba descubierta, frunci el seño ya que no recordaba haber venido justo aquí para conciliar el sueño. Intenté levantarme para ducharme, pero algo me estaba sosteniendo con firmeza de la cintura, me giré para ver que o quien era el causante de eso. Sonreí al notar que se trataba del brazo de Adam, lo cual quería decir que se había quedado a dormir conmigo y él me había traído a mi cama para que descansara mejor. Besé su mejilla y entré al baño para darme una ducha.

Minutos después salí dirigiendome a la cocina mientras me hacía un nudo desarreglado con mi cabello. En lo que lo hacía, Savannha se dirigió hacia la salida de la residencia.

-¿A donde vas?- susurré algo curiosa, pero me ignoró saliendo y azotando la puerta. Puse los ojos en blanco, no quería molestarme por cualquier estupidez que ella causara, apuesto a que eso es lo quería. En lo que hacía el desayuno, pude sentir unas manos rodear mi cintura por detrás haciéndome sonreir.
-Buenos días- dijo Adam besando mi cuello.
-Fue lindo de tu parte llevarme a mi habitación.
-Pensé que dormirias incomoda en ese sillón.
-Me hubieras despertado para al menos tener buen sexo y no sentirme molesta por lo de Sav.
-El sexo no lo arregla todo- hizo que me girara hacia él, me tomó de la cintura alzándome para sentarme sobre la encimera. Se colocó entre mis piernas mientras se desabrochaba su pantalón, deslizó mis bragas por mis piernas y subió mi vestido hasta mis muslos. Me jaló hacia él haciendo que rodeara su torso con mis piernas. Así que comenzó a caminar hasta deterse en la sala y acostarme sobre el sillón. Se colocó sobre mi y entró en mi interior en un suave movimiento.
-Pensé que el sexo no lo arreglaba todo- jadee, mordi mi labio inferior mientras se movía junto a mi.
-No, pero tenía muchas ganas de estar dentro de ti- trazó besos húmedos por el hueco de mi cuello.
-Estas consciente de que Savannha podría entrar en cualquier momento, ¿verdad?- gemi acoplándome a su ritmo.
-Ella se tardara en volver, fue a Royal's a trabajar.
-Bien, entonces no te detengas.
-No pensaba hacerlo.
-Genial- tomé su rostro entre mis manos chocando nuestros labios.