Capítulo 17

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Saqué las llaves de mi bolsillo trasero para poder abrir la puerta de la residencia, al hacerlo me acosté de inmediato en el sillón ya que hoy había tenido un día muy ajetreado y trabajé como loca unas tres horas más por haber faltado el día anterior.

-¿Y a ti que te pasó?- dijo Savannha saliendo de su habitación.
-No quiero hablar de ello.- ella puso los ojos en blanco y salió de la residencia.- ¿A donde vas?
-No quiero contestar eso- me guiñó un ojo y se fue. En eso Adam entró quitándose su sudadera sin percatarse de que yo estaba en la sala, luego entró Jude.
-¿Mal día?
-Pésimo- susurré con una leve sonrisa. También se quitó su sudadera, indicio de que ambos acaban de ir a correr.
-Tal vez así mejore tu día- le avente una almohada pero logró esquivarla.
-Tus abdominales no me vuelven loca como a esa novia tuya.
-Yo no tengo novias.
-Si, aja. Y que me dices de esa chica con la que Savannha te vio besandote.
-Oh, esa chica.
-Si, esa chica.
-Sólo... digamos que tenemos un buen convenio sexual- noté que Adam sonrió y después entró a su habitación.
-¿Acaso eso es como un código?
-No, ¿porque?
-Adam también me dijo que teníamos eso, pero ahora creo que ya no tenemos nada.
-Espera un momento, ¿tú y Adam tienen sexo?
-Si, teníamos.
-Pensé que eran amigos.
-Así es.
-Nunca te hagas amiga de un hombre porque siempre terminara en una cosa sexual.
-Pues eso no ocurrirá conmigo y contigo.
-No, nuestra amistad es diferente.
-¿Porque?
-Porque no me interesas como mujer.
-Oh, gracias.
-No quiero decir que no me parezcas una chica hermosa, pero desde el principio supe que terminarías acostándote con Adam y no seria bonito estar interesado en la misma chica que tu mejor amigo y compañero de residencia.
-Tú si eres un buen amigo de ellos, no como Vincent.
-Si, me enteré lo que le hizo a Sav, pero desde el principio no me agradaba.
-Entonces... ¿Adam estaba interesado en mi?- susurré sentándome en el sillón.
-Yo no dije eso.
-Claro que si, me quedó claro cuando dijiste que no sería bonito estar interesado en la misma chica que tu mejor amigo.- dije obvia.
-Oh, ¿yo dije eso?
-Sip.
-Pues nunca escuchaste eso de mi.
-No, ahora quiero que me expliques eso.
-Ya es hora de irse- dijo Adam saliendo de su habitación con una toalla alrededor de su torso, lo cual quería decir que ya se había duchado. Tomó a Jude por los hombros llevándolo a la salida de la residencia.
-De acuerdo, me iré, pero yo puedo caminar sólo.- antes de irse se empezaron a susurrar cosas, las cuales no pude escuchar con claridad. Después de que se fue Jude, Adam volvió a su habitación y parecía molesto. Frunci el seño, pero decidí darle poca importancia y me dirigí a mi habitación para darme una ducha relajante.

***

Minutos después salí de la ducha, casi parecía como una pasa humana, no debí pasar mucho tiempo bajo el agua relajante de mi ducha. Envolví mi cuerpo con una de mis toallas, mientras caminaba a la sala fui peinando mi cabello con mis dedos, pero al no poner atención choqué con alguien cayendo sobre su cuerpo.

-No otra vez- susurró Adam algo molesto.
-Lo siento, pero no puedo controlar el chocar con personas a las que les irrita mi presencia.
-¿Como sabes que me irrita tu presencia?
-Sólo lo sé, o si no porque otra razón me evitarías.
-¿De donde demonios sacas eso?
-Ay por favor, no me salgas con esa idiotez, ¿que hay cuando entraste después de correr con Jude? Hiciste como si yo no estuviera en el sillón, hasta me torturaste quitándote tu sudadera frente a mi.
-Yo no... Espera, ¿te torture?
-Agh... ¿sabes que? Tengo más cosas importantes que hacer que estar discutiendo estupideces contigo- estuve por quitarme de encima de él, pero me sostuvo rodeando mi cintura con firmeza.
-Espera... - frunci el seño, así que me colocó debajo de su cuerpo, poniendo mis brazos horizontalmente para entrelazar sus dedos con los míos, observo detenidamente mi rostro.
-¿Qué haces?- dije mirando accidentalmente sus labios, entonces sus labios cubrieron los míos, suspire cuando lo hizo, logré soltarme del agarre que tenía en mis brazos y coloqué una de mis manos en su nuca atrayéndolo más a mi.

Sus labios fueron trazando besos húmedos a lo largo de mi cuello haciéndome gemir, inmediatamente dirigí mis manos a la hebilla de su cinturón, quitándoselo con desesperación al igual que al desabrochar su pantalón. Deslice mis manos por debajo de su camiseta sintiendo su esculpido abdomen, me ayudó a quitársela, tomó mis piernas colocándolas alrededor de su torso, deslizando sus manos por éstas hasta mis muslos. Giró haciendo que nuevamente quedara encima de él, deshizo el nudo que tenía mi toalla quitandomela, me sujetó por la cintura en lo que se levantaba, envolví mis piernas alrededor de su torso mientras caminaba hacia su habitación, yo completamente desnuda y él aún con su pantalón puesto. Nuestros labios chocaron con frenesí, me colocó en el suelo en lo que se quitaba su pantalón dejando a la vista su desnudez ya que no traía nada puesto abajo. Casi me avente a su cuerpo envolviendo su torso con mis piernas, Adam me acostó en su cama sin dejar de besarme, tomó mi cabello en un puñado. Gemi al sentirlo dentro de mi, mi cuerpo entero lo extrañaba, pero esta vez sus movimientos no eran lentos y dulces sino necesitados y salvajes, sin importarme la diferencia seguí cada uno de sus movimientos, enterré mis uñas en su espalda cada cinco minutos.

Horas después rodó fuera de mi y yo me acosté sobre mi espalda respirando con dificultad, lo miré y sonreí, pero él sólo miraba el techo sin prestar atención de mi rostro.

-Wow, eso fue... intenso.
-Sal de mi habitación- susurró.
-¿Qué?- sonreí, pensando que se trataba de una broma, pero cuando no me miró borré mi sonrisa.
-Audrey, vete de mi habitación si no quieres que yo mismo te saque.
-¿Perdón? ¿Qué mierda te ocurre?
-Querías saber que es lo que quería de ti, ¿no? Pues es esto lo único que me interesa de ti.- frunci el seño y me cubrí con la sabana sintiéndome totalmente expuesta. Sentí mis lágrimas venir, pero me dispuse a evitarlas, no quería que me viera vulnerable. Me levante colocándome una de sus camisetas sin importarme si le molestaba o no. Antes de salir me giré hacia él, notando que mis lágrimas ya se deslizaban por mis mejillas.
-No quiero que vuelvas a hacer eso- solloce, salí de su habitación azotando la puerta tras de mi.
-¿Qué te sucede?- dijo Savannha al verme, estaba junto a Stryker viendo una pelicula, negué, entonces ella puso los ojos en blanco- No me digas, no quieres hablar de ello, ¿cierto?- solloce y se notó preocupada, así que me envolvió en un abrazo mientras comenzaba a llorar sin lograr detenerme.

Entre Tus BrazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora