Tuya - Stydia

21. Código azul

Capítulo veintiuno.

— Estas provocándome de nuevo — sus ojos se oscurecen

Relamo mis labios e inconsciente rozo sus dedos. Lo noto tensar la mandíbula en aquel preciso momento.

Mi vientre se contrae y el deseo invade mi cuerpo. No puedo pensar con claridad... la bruma no me deja.

Cojo sus dedos sobre mis labios y los deslizo desde mi mandíbula hasta mi cuello. Me doy cuenta de que Stiles empieza a tensarse, pero no detengo su mano hasta que la coloco en pecho. Y ahora Stiles estaba mirándome fijamente sin ningún remordimiento

Mis mejillas se sonrojan, pero sigo moviendo su mano sobre mi pecho, haciendo que encuentre el borde de mi escote. Los ojos Stiles estaban quemándome, me miraba con tanta profundidad que podría desarmarme, emanando como una avalancha

Pero sus labios caen sobre mi antes de que me de cuenta, sus dientes tomándome por sorpresa. Gemí y mi espalda choca contra la puerta de copiloto, pero él viene encima de mi sin apartar sus manos de mi pecho

Al contrario, sus manos empiezan a adentrarse en el interior de mi blusa para atrapar una copa de mi sujetador con la palma de su mano.

— No tienes idea de cuánto te deseo, Lydia — dice en suspiros mientras ataca mis labios

Baja a mi cuello y empieza a llenarlo de besos hasta el lóbulo de mi oreja, la misma que muerde ligeramente y escucho su respiración justo ahi, agitada. Enrollo mis piernas alrededor de su cintura cuando me recuesta en el asiento, echándolo hacia atrás para tener las espacio. Se apega a mi vientre metiendose entre mis piernas, mis dedos se pierden en su cabello, y gemí en su oído.

Sus manos deslizan mi blusa sobre mi cabeza. Empieza a recorrer mi espalda para desabrochar mi sujetado y tirarlo en el asiento. No tardar en hundir su rostro sobre mi clavícula, empezando a bajar por mi abdomen. Se quitó la camisa desabrochando los botones rápidamente y luego su corbata. Lo admiré, mis piernas todavía enredadas en su cintura

Stiles echa los dos asientos hacia atrás abriendo más espacio.

Lo atraje hacia mi para sacar su cinturón y deslizar sus pantalones hacia abajo. Y mientras que él hacia lo mismo con los míos, sus dedos arrastran mis bragas a un lado y hunde sus labios en mis piernas. Echo mi cabeza hacia atrás cuando su lengua me hace gemir y poner los ojos en blanco

No me importa nada. Yo solo quiero sentirlo más cerca, dentro de mi. Que él me hiciera olvidar todo, que me hiciera olvidar todas las cosas que me estaban pasando...todo lo que nos estaba pasando a los dos.

Que me hiciera olvidar que podría dejar de ver su rostro en dos semanas.

En este momento, en los asientos de su coche, nada se podía sentir mejor. La manera en la que ambos disfrutábamos de la compañía y del tacto del otro.

Lo escucho suspirar entre mis piernas y me dejo llevar. Muerdo mi labio inferior reteniendo aquellos gemidos que estaban a punto de salir, como aire dentro de un globo desinflado por un pequeño alfiler. Tuve que sostenerme de la manilla de la puerta para evitar retorcerme debajo de él. 

Sostiene mi cintura y se inclina hacia adelante. Ahora mi frente empieza a llenarse de sudor y de humedad, me doy cuenta de que alrededor de nosotros los vidrios del coche estaban empañados.

Cuando Stiles llega para hundirse sobre mi, no puedo evitar gemir en voz alta. Y la palma de su mano reposa en el vidrio de la ventana encima de mi, pero solo me queda aferrarme a su espalda mientras se mueve hacia arriba y hacia abajo. Escucho un gruñido cuando una de sus embestidas llega hasta mi en forma de derrumbe. Sus labios me aprietan pero tengo que alejarme para gemir.